El preacuerdo, conseguido por Espa?a en Luxemburgo, bien recibido por los 'diez'

Tras aceptar Espa?a en Luxemburgo lo inaceptable, pero tambi¨¦n inevitable, la cumbre europea de Fontainebleau -mediando su ¨¦xito- podr¨ªa pronunciarse formalmente el pr¨®ximo martes sobre la fecha del 1 de enero de 1986 para el ingreso espa?ol en la CEE, se?alaron ayer fuentes comunitarias. En todo caso, a?adieron estas fuentes, la cumbre ya estar¨¢ capacitada para declarar que las negociaciones de adhesi¨®n concluir¨¢n en 1984.

Espa?a, la Comisi¨®n Europea y la Presidencia de la CEE (francesa saliente e irlandesa entrante) "acordaron" el marco general de la transici¨®n para la integraci¨®n de la agricultura. Hasta que Espa?a no hubiera dado este paso, la CEE no estaba dispuesta a hacer concesiones reales. El futuro hablar¨¢. Manuel Mar¨ªn y su hom¨®logo franc¨¦s Roland Dumas decidieron el pasado viernes en Madrid jugarse el todo por el todo el lunes en Luxemburgo, salt¨¢ndose los procedimientos comunitarios y la Comisi¨®n. En todo caso, el acuerdo informal y condicional fue ayer muy bien acogido por los embajadores de los diez, reunidos en sesi¨®n plenaria en Bruselas, considerando que las negociaciones de adhesi¨®n se han desbloqueado y se entra en el tramo final.Dadas las condiciones pol¨ªticas planteadas por Francia, el paso dado era inevitable para acelerar la negociaci¨®n. Ya Mar¨ªn lo hab¨ªa dejado entrever tres meses atr¨¢s. El juicio de valor no puede ser puramente econ¨®mico, pues bajo la presidencia francesa se ha impulsado la negociaci¨®n. Y lo ocurrido en Luxemburgo -¨²ltima reuni¨®n, y hab¨ªa que aprovecharla, bajo presidencia francesa tiene probablemente relaci¨®n con el aparente cambio de actitud franc¨¦s en materia antiterrorista y con la OTAN.

Principio de reciprocidad

Espa?a acept¨® el sistema de dos etapas -ll¨¢mesele ahora "fase de la verificaci¨®n de la convergencia"- para la integraci¨®n de sus frutas y hortalizas a lo largo de 10 a?os. La CEE hizo dos peque?as aperturas en sus principios: durante la primera etapa de cuatro a?os, este sector espa?ol tendr¨¢ acceso a las subvenciones de la CEE para mantener los precios y se aplicar¨¢ desde la adhesi¨®n la "preferencia comunitaria" en materia comercial. Principios v¨¢lidos -pol¨ªticamente hablando- para evitar la apariencia de trato de pa¨ªs tercero tras la adhesi¨®n, pero cuyos efectos econ¨®micos son m¨ªnimos en la pr¨¢ctica. Espa?a los ha aceptado, pero, seg¨²n Mor¨¢n, "se reserva puntualizaciones de ciertos detalles t¨¦cnicos".

A cambio, Espa?a ha logrado que se acepte el principio de la reciprocidad para proteger sus "productos sensibles" (carne, l¨¢cteos, cereales y az¨²car) frente a la competencia comunitaria. Pero Espa?a pide un sistema de contingentes y la CEE lo rechaza. Al final es posible incluso que estos productos sensibles entren tambi¨¦n en un sistema de dos fases -¨²nica manera de lograr contingentes-, como propuso la Comisi¨®n Europea en un primer momento, f¨®rmula de la que Espa?a hizo mangas y capirotes para suprimir, y con verdaderas subvenciones comunitarias, desde el primer d¨ªa.

En materia de vino y aceite de oliva, el texto resultante de las ocho horas de negociaci¨®n conten¨ªa una menci¨®n de la comisi¨®n sobre "disciplinas necesarias diferenciadas" y que "a problemas diferentes caben soluciones distintas en la CEE". La v¨ªa queda abierta para un sistema puramente espa?ol. Mor¨¢n insisti¨® en la necesidad de un sistema "comunitario y no discriminatorio".

Naturalmente, todo esto va dentro de la aceptaci¨®n -?qu¨¦ quedar¨¢ realmente?- de unos principios de "equilibrio, progresividad y reciprocidad" en los cap¨ªtulos y la globalidad de la negociaci¨®n. La pesca ser¨¢ lo m¨¢s dif¨ªcil. En cuesti¨®n de desarme arancelario rec¨ªproco para la industria, la CEE no ha aceptado a¨²n las tesis espa?olas de un ritmo m¨¢s lento en los primeros a?os. Y Espa?a ya ha se?alado su disposici¨®n -?contingentes arancelarios?- para solucionar el problema de sus aranceles m¨¢s elevados.