Tercera semana de conflicto de los remolcadores del puerto de C¨¢diz
El puerto de C¨¢diz sigue pr¨¢cticamente paralizado al cumplirse la tercera semana de huelga de los trabajadores de los remolcadores de las compa?¨ªas Valenciana y Sertosa concesionarias del servicio. Varias compa?¨ªas navieras han suspendido el atraque de sus barcos desvi¨¢ndolos a otros puertos, y seis grandes petroleros se encuentran retenidos en los astilleros de C¨¢diz con importantes p¨¦rdidas econ¨®micas.
Los efectos de la huelga empiezan a ser importantes, al reducir su actividad los pr¨¢cticos del puerto que hasta ahora ven¨ªan realizando las maniobras de atraque y desatraque de los buques si as¨ª lo requer¨ªan, distorsion¨¢ndose, en opini¨®n del comit¨¦ de huelga, el efecto del paro de los remolcadores. Defiende el comit¨¦ que seg¨²n la legislaci¨®n vigente en el puerto, est¨¢ prohibido atracar barcos de m¨¢s de 100 metros de eslora y 25 metros de calado sin la ayuda de un remolcador. Los pr¨¢cticos del puerto han decidido maniobrar solo con los buques que est¨¦n debajo de esas medidas.
Las p¨¦rdidas econ¨®micas a causa de la cancelaci¨®n de atraque, por compa?¨ªas como Trasatl¨¢ntica o Tras-Bool, a¨²n no han podido ser evaluadas por la Junta de Obras del Puerto. Si pueden ser cuantiosas las de las compa?¨ªas de los seis petroleros que se encuentran retenidos: los espa?oles Santa Mar¨ªa de la naviera Golfo de Vizcaya, Mundaka y Ordu?a de la naviera Vizca¨ªna y el Cerro Colorado de Explosivos R¨ªo Tinto, junto a otros dos extranjeros. Seg¨²n fuentes de la naviera, la paralizaci¨®n del Santa Mar¨ªa cuesta tres millones de pesetas diarias.
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