Trabajadores y estudiantes chilenos secundan masivamente la primera huelga general contra el r¨¦gimen de Pinochet

Cuatro personas, entre ellas un ni?o, resultaron ayer muertas y cinco m¨¢s fueron hospitalizadas con graves heridas de bala, as¨ª como un polic¨ªa, durante la huelga general convocada por el Comando Nacional de Trabajadores, la primera en los once a?os del r¨¦gimen militar del general Pinochet. " huelga fue respaldada mayoritariamente por los trabajadores y estudiantes chilenos. U actividad se redujo en m¨¢s de un 50% en las principales ciudades y se esperaba que este porcentaje aumentara durante la tarde y la noche, seg¨²n dijeron los organizadores del paro. La huelga se desarroll¨® en un clima de tensi¨®n por el confinamiento de 260 personas enviadas a un centro de detenci¨®n en el des¨¦rtico norte, la detenci¨®n de m¨¢s de 150 manifestantes el lunes y la r¨ªgida censura de prensa. Las autoridades castrenses de Santiago de Chile impusieron el toque de queda en la ciudad desde las diez de la noche a las cinco de la madrugada de hoy.

Los estudiantes Fernando Humberto Montesinos, de 22 a?os y Christi¨¢n Lara Vald¨¦s, de 20, murieron al recibir de la polic¨ªa varios impactos de bala en el barrio perif¨¦rico de la Cisterna. Un ni?o, Hugo Rodr¨ªguez Mena, y Juan Pino Elizondo, que acudi¨® en su ayuda, fallecieron electrocutados por un cable el¨¦ctrico que los manifestantes, seg¨²n fuentes policiales, pretend¨ªan utilizar para impedir el avance de los veh¨ªculos de la polic¨ªa. El estudiante Claudio Astorga fue gravemente herido por disparos que un grupo de desconocidos le hizo desde un autom¨®vil que circulaba por el barrio obrero de Pudahuel, seg¨²n fuentes de la polic¨ªa. Tambi¨¦n una mujer de 55 a?os result¨® herida al hacer explosi¨®n una bomba en las inmediaciones de un comercio situado al Este de la capital chilena, Santiago de Chile.Entre las reivindicaciones del paro se incluyen mejoras salariales, sociales y pol¨ªticas, particularmente un r¨¢pido retorno a la democracia en el pa¨ªs.

Durante la noche del lunes, decenas de barricadas y fogatas hechas con neum¨¢ticos fueron levantadas en los barrios pobres de la ciudad al culminar un d¨ªa de protesta en preparaci¨®n de la huelga de ayer. La polic¨ªa intent¨® dispersar algunas barricadas y se registraron numerosos enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden.

Fuentes de la polic¨ªa, citadas por la agencia Reuter, informaron de que durante la noche del lunes hicieron explosi¨®n en Santiago 11 bombas, una de las cuales hiri¨® a una mujer.

El llamamiento a golpear cacerolas a las nueve de la noche del lunes fue deso¨ªdo por la mayor parte de la ciudad, probablemente por la escasa difusi¨®n de la convocatoria, ya que la prensa tiene prohibido informar de estas convocatorias y las radios opositoras, principal fuente de informaci¨®n popular, fueron silenciadas por orden militar.

En las primeras horas de la jornada de ayer miles de personas esperaban alg¨²n tipo de veh¨ªculo para dirigirse hacia sus lugares de trabajo, pero el transporte p¨²blico redujo su actividad a menos de un 10%.

Los colegios y centros universitarios registraron un alto absentismo escolar, que super¨® en promedio el 70%, mientras que las principales f¨¢bricas de la capital chilena permanecieron cerradas o trabajando a la mitad de su capacidad.

"?ste es un gran ¨¦xito que incluso supera nuestras expectativas. El transporte p¨²blico par¨® en un 90%, el absentismo laboral ha sido enorme y muchas f¨¢bricas est¨¢n cerradas. A partir de ahora, la lucha contra la dictadura de Pinochet ser¨¢ total", manifest¨® el presidente del Comando Nacional de Trabajadores, Rodolfo Seguel.

Grupos de activistas formaron piquetes frente a algunas industrias de Santiago para impedir el desarrollo normal del trabajo y en los puntos de m¨¢xima concentraci¨®n industrial fueron levantadas barricadas.

Durante todo el d¨ªa se produjeron choques entre la polic¨ªa y grupos de manifestantes. Los grandes centros mineros del cobre y del petr¨®leo funcionaron normalmente, puesto que los trabajadores sustituyeron el paro por una negativa a acudir a la cantina en la hora del almuerzo como una forma de apoyar la protesta contra el r¨¦gimen.

"En las empresas estatales los trabajadores no pueden acatar el paro porque ser¨ªan despedidos de inmediato, pero siempre encuentran una forma de manifestar su repudio a la dictadura", dijo el dirigente petrolero Ruiz di Giorgio. Cinco trabajadores del cobre que acataron un paro minero el a?o pasado y fueron despedidos con otro millar de compa?eros, cumplieron ayer 30 d¨ªas de huelga de hambre.