El Vaticano antepone los dogmas a la uni¨®n de las iglesias

El Vaticano ha puntualizado, a trav¨¦s de un art¨ªculo en L'Osservatore Romano, los l¨ªmites del acercamiento ecum¨¦nico entre los creyentes y los no cat¨®licos, recordando que la Iglesia de Roma no renuncia a ninguno de sus dogmas, especialmente el de la infalibilidad del Papa, y que la uni¨®n con los dem¨¢s cristianos no debe intentar conseguirse a "cualquier precio".El ¨®rgano de Prensa oficioso de la Santa Sede ha publicado en su primera p¨¢gina un art¨ªculo del te¨®logo franc¨¦s Daniel Ols en el que se critica un libro publicado en 1983 por Heinrich Fries y el te¨®logo Karl Rahner, fallecido en 1984, titulado La unificaci¨®n de las iglesias: una posibilidad real.

El autor del art¨ªculo, el dominico Daniel Ols, profesor de mariolog¨ªa de la universidad Angelicum, de Roma, acusa en el mismo a los dos c¨¦lebres te¨®logos de propiciar un "aut¨¦ntico cambio en la fe cat¨®lica", a?adiendo que su obra "est¨¢ plagada de enormes portadores de ilusiones peligrosas".

L'Osservatore Romano acusa a Fries y Rahner de hacer depender la uni¨®n de las iglesias de la "situaci¨®n actual", lo que equivaldr¨ªa a someter a la palabra de Dios a "la sabidur¨ªa del mundo y al poder del demonio", padre del mal y de las ideolog¨ªas err¨®neas profesadas por los hombres, seg¨²n el articulista.

Daniel Ols critica tambi¨¦n el "inmoderado celo ecum¨¦nico" de Fries y Rahner, para quienes "la uni¨®n de las iglesias es un valor supremo al que debe llegarse inevitablemente", y, en consecuencia, todo aquello que fuera inaceptable por tal o cual Iglesia se descartar¨ªa como no perteneciente al "dep¨®sito de la fe".

Para el te¨®logo dominico, la uni¨®n de las iglesias es un deber y una esperanza, pero no est¨¢ escrito en ninguna parte que deba conseguirse a cualquier precio".

Al analizar en detalle las tesis del libro que critica, Ols denuncia la "peligrosa ilusi¨®n" seg¨²n la cual las iglesias cristianas estar¨ªan de acuerdo en lo esencial y discrepar¨ªan en lo accesorio. "Los nuevos dogmas", explica en su art¨ªculo, "proclamados por la Iglesia cat¨®lica a lo largo de los siglos no son ayudas exteriores, sino explicaciones de la fe original, sobre la cual ni el Papa ni el concilio tienen el derecho de cambiar ni una coma".