El Grupo Popular declara su plena confianza en la conducta de Lasu¨¦n y de Herrero
El Grupo Popular del Congreso acord¨® ayer reiterar su "plena confianza en la absoluta correcci¨®n legal y pol¨ªtica" de la actuaci¨®n de sus diputados Jos¨¦ Ram¨®n Lasu¨¦n y Miguel Herrero Rodr¨ªguez de Mi?¨®n, cuya empresa de asesoramiento, Adicsa, ha sido acusada de irregularidades econ¨®micas por un antiguo socio de Estados Unidos. El propio Lasu¨¦n afirm¨®, por su parte, que las acusaciones de Carter Ciews, ex directivo de la empresa norteamericana Gray & Co., son totalmente falsas y tienen su origen exclusivamente en las diferencias entre Ciews y su antigua empresa, Gray.
El propio presidente de Alianza Popular, Manuel Fraga, dio cuenta a los informadores de la reuni¨®n del Grupo Popular en la que, entre otras cosas, se estudi¨® este asunto. A la reuni¨®n no asisti¨® Lasu¨¦n, que se encontraba en ese momento en la sesi¨®n de la Comisi¨®n de Econom¨ªa del Congreso. Miguel Herrero s¨ª estuvo presente, para informar al grupo, y despu¨¦s de su informe se retir¨® para permitir mayor libertad en las deliberaciones.Seg¨²n explic¨® Fraga, el grupo acord¨® expresamente no tomar ninguna iniciativa sobre este asunto y se limit¨® a mostrar p¨²blicamente su confianza en la honorabilidad de los dos diputados. Incluso por parte de los partidos coaligados con AP en el grupo parlamentario se propuso que el partido de Fraga, al que pertenecen Lasu¨¦n y Herrero, volviese atr¨¢s en su decisi¨®n de realizar una investigaci¨®n sobre el asunto, de la que se encarga el tambi¨¦n diputado de AP Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz Gallard¨®n. Fraga indic¨® que no pod¨ªa anularse esta iniciativa porque ya hab¨ªa sido puesta en marcha, precisamente, ante la petici¨®n insistente de los interesados en este sentido.
El l¨ªder conservador no puso ninguna objeci¨®n a la posibilidad de que se constituya en el Parlamento espa?ol un registro de intereses semejante al que funciona en las c¨¢maras parlamentarias de Estados Unidos. "Nada impide que se haga", indic¨®, aunque aclar¨® que este registro en todo caso perfeccionar¨ªa la norma ahora existente, por la que cada parlamentario debe realizar ante notario una declaraci¨®n de sus intereses econ¨®micos.
Al preguntarle qu¨¦ cr¨¦dito le merec¨ªan las especulaciones seg¨²n las cuales dirigentes socialistas est¨¢n relacionados con la propagaci¨®n de este asunto, Fraga dio a entender que su partido no tiene nada que ver en esas apreciaciones. En concreto, el l¨ªder de AP afirm¨®: "Nosotros no hemos hecho ning¨²n comentario en este sentido", y agreg¨® que su grupo tiene la impresi¨®n de que lo que ha pasado es que las discrepancias entre Gray y su antiguo directivo Carter Clews han dado lugar a todo tipo de especulaciones sin fundamento.
La imagen de Reagan
El propio Jos¨¦ Ram¨®n Lasu¨¦n dio a este peri¨®dico en el Congreso de los Diputados una versi¨®n que apunta en el mismo sentido. El diputado, tras afirmar que es totalmente falsa la versi¨®n de los hechos ofrecida por Clews, dijo que el origen del problema est¨¢ en que esta persona, tras haber sido despedida de Gray & Co, intenta desprestigiar a esta empresa. Para ello, seg¨²n esta versi¨®n, aprovecha que Gray est¨¢ encargada de cuidar la imagen del presidente norteamericano, Ronald Reagan, y por esta circunstancia utiliza a dos peri¨®dicos cuya l¨ªnea considera contraria a Reagan, como son The Washington Post y The New York Times. Lasu¨¦n y Herrero ser¨ªan, de esta forma, meramente utilizados por Clews como munici¨®n para sus ataques contra su antigua compa?¨ªa.Lasu¨¦n insisti¨® en que los 25.000 d¨®lares (4.500.000 pesetas) depositados por Gray en Espa?a a favor de Adicsa no llegaron a ser utilizados, ya que la parte espa?ola rescindi¨® el contrato por acta notarial, una copia de la cual envi¨® Adicsa a Gray & Co en su momento. Esa cantidad, que era un dep¨®sito previo a la firma de un contrato entre ambas compa?¨ªas, permanece bloqueada en un banco espa?ol a la espera de que la empresa norteamericana retire los fondos.
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