El embargo de Estados Unidos paralizara cientos de m¨¢quinas nicarag¨¹enses por falta de repuestos

Los nicarag¨¹enses podr¨¢n tomar coca-cola a pesar del embargo norteamericano. El gerente de la empresa, Guillermo Roeder, asegura que las concesionarias de Costa Rica y Guatemala est¨¢n dispuestas a suministrar el concentrado de f¨®rmula ultrasecreta que permite obtener la bebida. En todo caso, las existencias propias aseguran la producci¨®n hasta fines de 1986. S¨®lo falta ahora encontrar repuestos para la planta procesadora de gas carb¨®nico, a la que se le ha roto una manguera. Cientos de m¨¢quinas en todo el pa¨ªs est¨¢n amenazadas de paro por el simple fallo de una pieza. A corto plazo, ese va a ser el mayor impacto del bloqueo.

En la mayor¨ªa de los casos se trata de m¨¢quinas obsoletas, que dejaron de fabricarse hace a?os y cuyas peticiones de repuestos s¨®lo atiende la casa matriz en Estados Unidos, sin que se pueda recurrir a sus filiales en terceros pa¨ªses.La empresa nicarag¨¹ense de electricidad ten¨ªa pendiente un pedido por valor de 18 millones de d¨®lares (3.150 millones de pesetas). Una parte podr¨¢ obtenerse en Latinoam¨¦rica, pero llevar¨¢ tiempo conseguir l¨ªneas de cr¨¦dito y, en cualquier caso, subir¨¢n los costes de transporte. Mientras tanto, los apagones empiezan a ser una rutina.

El Ministerio de Salud compra cada a?o en Estados Unidos repuestos hospitalarios valorados en m¨¢s de cinco millones de d¨®lares (875 millones de pesetas). Sin ellos, pueden dejar de funcionar en cuesti¨®n de semanas equipos de rayos X, respiradores para enfermos cardiacos, equipos oftalmol¨®gicos y sistemas de iluminaci¨®n de quir¨®fanos. La falta de una reglamentaci¨®n precisa del embargo ha impedido saber hasta ahora si este tipo de productos humanitarios ser¨¢ incluido o no en la prohibici¨®n.

El comandante Jaime Wheelock, ministro de Desarrollo Agro pecuario y Reforma Agraria, ha dicho: "Nos quieren cobrar con hambre y escasez nuestro derecho a ser libres". Al anunciar un paquete de medidas de emergencia para combatir el bloqueo, ha fijado un objetivo nacional a medio plazo: aprovechar esta ocasi¨®n para romper una dependencia hist¨®rica de Estados Unidos, aunque ha admitido que no ser¨¢ sencillo ni se puede hacer de la noche a la ma?ana.

El proceso de industrializaci¨®n de Nicaragua se inici¨® en los a?os sesenta, al amparo de una bonanza agroexportadora, con la adquisici¨®n de plantas de segunda mano, lo que Wheelock ha calificado como tecnolog¨ªa de desecho, que se tratar¨¢ ahora de cambia aceleradamente. Con este criterio, el Gobierno se propone diversificar sus equipos industriales, per nadie ha explicado de d¨®nde sacar¨¢ las divisas necesarias.Seg¨²n el empresario Jaime Bengoechea, vicepresidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), Nicaragua "no es sujeto de cr¨¦dito, porque no puede pagar la deuda acumulada de 4.700 millones de d¨®lares (836.599 millones de pesetas). La moratoria es un hecho, aunque no haya sido formalmente declarada. El pa¨ªs dej¨® de pagar hace tiempo".

Se agrandar¨¢ el d¨¦ficit

El viceministro de Exteriores, V¨ªctor Hugo Tinoco, ha reconocido que este a?o se agrandar¨¢ la brecha del d¨¦ficit. Las exportaciones se estiman en 350 millones de d¨®lares (unos 61.250 millones de pesetas), mientras que el pa¨ªs necesita importar productos por valor de 900 millones (157.500 millones de pesetas) s¨®lo para sobrevivir. Seg¨²n la canciller¨ªa nicarag¨¹ense, este desajuste fue ¨¦l m¨®vil de la gira que el presidente Daniel Ortega acaba de realizar por los pa¨ªses del bloque comunista. "Est¨¢ en juego nuestra supervivencia", dijo Tinoco para justificar un viaje que Bengoechea califica de "tan inoportuno como el embargo".Los empresarios privados, queest¨¢n entre los principales aliados que Reagan tiene en el interior de Nicaragua, ser¨¢n los primeros afectados por el bloqueo. Su dependencia de EE UU es mucho mayor que la del sector p¨²blico, porque ¨¦ste se ha preocupado de adquirir nuevos equipos en los pa¨ªses socialistas y en Europa occidental.

La valoraci¨®n del embargo sigue siendo a¨²n muy dispar. Bengoechea minimiza sus efectos al decir que "es como un catarro para un enfermo de c¨¢ncer". Reconoce que ha habido cierto revuelo entre los empresarios, lo que oblig¨® a celebrar una asamblea extraordinaria el pasado viernes, pero a?ade que son otros sus dolores de cabeza. "El mayor problema es la falta de divisas. De poco nos sirve que nos quieran vender si no tenemos con qu¨¦ pagar".

El vicepresidente del Cosep dice que la econom¨ªa necesita una inyecci¨®n inmediata de 1.000 millones de d¨®lares que no hay de d¨®nde sacar. "Que no nos venga ahora el Gobierno diciendo que el bloqueo ha hundido el pa¨ªs. Esto ya era un desastre".

La iniciativa de Reagan ha tenido el efecto de molestar a todos. al Gobierno, por razones obvias. A los empresarios, porque les va a perjudicar el bolsillo. A la oposici¨®n pol¨ªtica, porque presiente que puede ser una coartada para explicar cualquier fracaso.

El economista Xavier Gorostiaga, director del Instituto Nicarag¨¹ense de Investigaciones Econ¨®micas y Sociales (INI?S), ha fijado algunas conclusiones -el impacto del embargo ser¨¢ mayor a corto que a medio plazo la econom¨ªa va a sufrir m¨¢s por la imposibilidad de importar de Estados Unidos que por la de exportar a ese pa¨ªs; la presencia de multinacionales norteamericanas en toda Am¨¦rica Latina, no involucradas en la prohibici¨®n, paliar¨¢ sus efectos.

La alianza diplom¨¢tica de los pa¨ªses centroamericanos con Estados Unidos no puede traducirse en un apoyo literal al embargo, ya que en ese caso las comunicaciones por tierra entre Costa Rica y el resto de la regi¨®n quedar¨ªan rotas. Gorostiaga concluye, sin embargo, que la medida ha asestado un golpe de muerte al Grupo de Contadora en un momento en que la negociaci¨®n parec¨ªa arrancar de nuevo.