Elisa Sesma cree que la campa?a contra el aborto es "un pataleo de la derecha"

La doctora Elisa Sesma, de 31 a?os, que practic¨® el primer aborto autorizado en Navarra el pasado d¨ªa 16, en la residencia Virgen del Camino, de la Seguridad Social, afirma que la campa?a desatada desde algunos sectores de la sociedad navarra contra ella es un pataleo de la derecha no democr¨¢tica, incapaz de respetar las opiniones de los dem¨¢s y la nueva ley de interrupci¨®n voluntaria del embarazo. Elisa Sesma, que ha sido calificada de "asesina legal" en las octavillas aparecidas con profusi¨®n en Pamplona, afirma que no se arrepiente de nada.

Desde que se practic¨® este aborto, el pasado d¨ªa 16, comenz¨® en Navarra una fuerte pol¨¦mica que en las ¨²ltimas horas ha alcanzado una gran virulencia hasta el punto de que las calles de Pamplona han sido sembradas de octavillas an¨®nimas en algunas de las cuales se dice textualmente: "Rogad a Dios por el primer navarro torturado y asesinado en el vientre de su madre por la doctora Elisa Sesma". O esta otra en la que se resalta: "Elisa Sesma, pasar¨¢s a la historia como la primera asesina legal". Elisa Sesma practic¨® este aborto a una mujer cuyo feto podr¨ªa haber sufrido graves malformaciones como consecuencia de las pruebas radiol¨®gicas a las que fue sometida en su primer mes de gestaci¨®n a causa de unos problemas en las v¨ªas urinarias. La totalidad de los m¨¦dicos del departamento de tocoginecolog¨ªa del hospital Virgen del Camino de la Seguridad Social, en Pamplona, donde se realiz¨® esta intervenci¨®n, se neg¨® a practicarlo. Previamente a la operaci¨®n le expresaron su exigencia de que el Instituto Nacional de la Salud (Insalud) pusiera una segunda persona a la hora de llevar a cabo estas intervenciones, ya que, de lo contrario, se ver¨ªan implicados en el caso de tener que resolver posibles complicaciones, circunstancia esta que incluso quer¨ªan evitar.Elisa Sesma, de 31 a?os, casada, madre de una ni?a de cinco a?os, especialista en ginecolog¨ªa y obstetricia, que trabaja en una consulta extrahospitalaria del Insalud, declara que le doli¨® bastante la campa?a montada contra ella.

"Creo que est¨¢ orquestada desde la derecha. Es un pataleo, una forma de protestar contra algo en lo que no est¨¢n de acuerdo. Quiz¨¢ personalizando, ya que no pueden protestar contra la ley porque perdieron en el arremeten ahora contra m¨ª", afirma. De todas formas, todo esto le ha afectado sobre todo por su familia. "Mis padres", dice, "son muy religiosos y no est¨¢n de acuerdo. Mis hermanos, sin embargo, me apoyan solidariamente". "No deseaba que mis padres se enterasen de lo sucedido, no porque me pareciera una cosa que hab¨ªa que ocultar, sino sencillamente porque no quer¨ªa, que sufrieran por algo que no entienden".

Recalca con firmeza que no se arrepiente de nada y cuando se le pregunta si seguir¨¢ efectuando este tipo d¨¦ intervenciones afirma con rapidez: "Pienso que si tengo que ser coherente con mis ideas tiene que ser as¨ª". "Realic¨¦ esta operaci¨®n", agrega, "porque trabajando en la sanidad p¨²blica se solicit¨® mi colaboraci¨®n y porque estaba de acuerdo con realizar estas operaciones. Creo que el aborto es un mal menor y que la soluci¨®n a este tipo de problemas pasar¨ªa porque la Administraci¨®n p¨²blica resolviera de forma efectiva la planificaci¨®n familiar tanto en los m¨¦todos reversibles como en las esterilizaciones".

La doctora Sesma considera que la legislaci¨®n actual del aborto tal y como est¨¢ establecida en Espa?a es ambigua en algunos puntos. "Mi opini¨®n es que la mujer es quien debe decidir. La ley deber¨ªa ser, a mi juicio, sin restricciones, como sucede en el Reino Unido u Holanda". Elisa Sesma ha recibido el apoyo del Insalud, del Gobierno de Navarra y del propio ministro de Sanidad, Ernest Lluch, quien convers¨® con ella telef¨®nicamente durante breves minutos. Ernest Lluch le transmiti¨® su solidaridad y apoyo en estos momentos y le dijo que no se preocupase porque a ¨¦l tambi¨¦n le hab¨ªan llamado asesino.

La joven m¨¦dica asegura que no ha recibido amenazas, personales ni telef¨®nicas por su. actuaci¨®n y que desconoce qui¨¦nes fueron las personas que facilitaron su nombre a los medios de comunicaci¨®n, pero opina que est¨¢n en la misma l¨ªnea que la gente que ha lanzado los panfletos por las calles. "Es tambi¨¦n una forma de agredir personalizando contra una cosa con la que no est¨¢n de acuerdo. No pueden luchar de otra forma y no est¨¢n dispuestos a tolerar nada, aunque sea una ley aprobada por el Parlamento", se?ala.