Las ayudas para el banco p¨²blico
El Banco Exterior de Espa?a, con mayor¨ªa de capital p¨²blico, era el cuarto de los ocho grandes bancos nacionales que preocupaba a la autoridad monetaria. Esta preocupaci¨®n ven¨ªa de lejos porque ya hace a?os, en 1982, el dividendo a repartir entre sus accionistas fue inferior al de un a?o antes. A partir de ese a?o, el Banco Exterior logr¨® recuperar su rentabilidad creciente gracias sobre todo a los ingresos extraordinarios generados por las diferencias de cambio, dada la ca¨ªda de la peseta frente al d¨®lar.Pero 1985 ha supuesto un cambio importante. Los ingresos por diferencias de cambios disminuyeron de tal manera que los excedentes generados por el Exterior eran insuficientes para hacer todas las provisiones recomendables y, adem¨¢s, repartir un dividendo entre sus accionistas. Miguel Boyer, presidente de la entidad desde la crisis ministerial de julio de 1985, tuvo que anunciar -de forma solapada que el banco por ¨¦l presidido repartir¨ªa el mismo dividendo que en 1984. Se repet¨ªa la misma historia que con los otros grandes bancos nacionales. Fue otra parte del Estado, el Instituto de Cr¨¦dito Oficial (ICO) y en menor medida el propio Banco de Espa?a, el que mediante transferencias de fondos permiti¨® que el Exterior llegara a repartir ese mismo dividendo. El Banco de Espa?a, porque habr¨ªa aceptado unos niveles menores de provisiones para morosos y fallidos -aunque siempre dentro de los calendarios de adaptaci¨®n-, lo que permiti¨® destinar menos recursos a estas provisiones. El ICO, porque elev¨® hasta el 1% el diferencial cedido al Banco Exterior de Espa?a por su gesti¨®n de los recursos presupuestarios des tinados a financiar exportaciones espa?olas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.