Miembros de la brigada Lincoln conmemoran en Nueva York el 50? aniversario de la guerra de Espa?a

Unos 300 supervivientes de la brigada Abraham Lincoln, que luch¨® a favor de la Rep¨²blica en la guerra civil espa?ola, conmemoraron el lunes en Nueva York el 50? aniversario de la contienda con el mismo lema -"No pasar¨¢n"- que hizo acudir a Espa?a en 1936 a 3.000 nortearnericanos para enfrentarse al fascismo. Viejas pel¨ªculas con las im¨¢genes de Francisco Franco y Dolores Ib¨¢rruri, Pasionaria, los carteles de la propaganda republicana y las canciones de las trincheras fueron vistas, escuchadas y entonadas de nuevo por miles de personas que abarrotaron la sala Avery del Lincoln Center neoyorkino.Los actuales 350 supervivientes de la brigada Lincoln, que, organizada fundamentalmente por el partido comunista, envi¨® a Espa?a 3.000 voluntarios, de los que s¨®lo regresaron 1.750, defienden hoy la causa de la revoluci¨®n sandinista como hace medio siglo lo hicieron con la Rep¨²blica espa?ola. Ronald Reagan, que, en 1984, compar¨® la ayuda norteamericana a la contra nicarag¨¹ense con el apoyo prestado a la Rep¨²blica en 1936, y afirm¨® que los miembros de la brigada Lincoln lucharon en el "bando equivocado", fue criticado y abucheado en el acto del Lincoln Center.

"El presidente estaba ciego ante la realidad de los a?os treinta", afirm¨® uno de los participantes en la celebraci¨®n, durante la que se denunci¨® tambi¨¦n la pol¨ªtica de "neutralidad" observada por Roosevelt durante la guerra civil, que permiti¨® sin embargo que Franco recibiera petr¨®leo y camiones de Estados Unidos. "Cuando Reagan nos compara a los contra act¨²a como un payaso", declar¨® a EL PA?S Samuel Slipyan, un veterano de la Lincoln de 78 a?os, que luch¨® en el Jarama, en Teruel y en el Ebro. Slipyan, que, como muchos de sus compa?eros, no pudo contener las l¨¢grimas en el curso del homenaje, viaja a Espa?a todos los a?os y afirm¨® que la democracia en nuestro pa¨ªs "est¨¢ viva, aunque es muy grave el problema del paro".

Varios de los brigadistas, consultados por EL PA?S, afirmaron que si hoy volvieran a darse las mismas condiciones, la lucha entre el fascismo de Hitler y Mussolini y las democracias, volver¨ªan a repetir su actuaci¨®n de 1936. "Yo era comunista entonces y lo volver¨ªa a hacer hoy. Es la ¨²nica cosa en mi vida de la que estoy orgulloso", afirm¨® Charles Nusser, de 71 a?os. El comandante de la brigada, Steve Nelson, un destacado comunista que luego rompi¨® con el partido, afirm¨® en el acto de Nueva York: "Hace 50 a?os la cuesti¨®n m¨¢s importante de nuestro tiempo era la guerra civil espa?ola. Hoy lo son la lucha por la paz y contra la intervenci¨®n norteamericana en Centroam¨¦rica".

Muchos de los brigadistas que tras la contienda espa?ola lucharon en la II Guerra Mundial tuvieron problemas, a su regreso a Estados Unidos, con la caza de brujas anticomunista del senador McCarthy. Su afiliaci¨®n comunista les hizo ser perseguidos, no encontraban trabajo y algunos, como Nelson, pasaron muchos a?os en la c¨¢rcel. "Hoy, la mayor¨ªa de nosotros es cr¨ªtica con la Uni¨®n Sovi¨¦tica", explic¨® William Susman, un veterano de la brigada, productor de televisi¨®n y uno de los realizadores del homenaje del Lincoln Center.

"Ha sido una manifestaci¨®n entra?able de los restos de la historia". As¨ª calific¨® el acto el embajador de Espa?a ante las Naciones Unidas, Fernando Mor¨¢n, que asisti¨® al homenaje junto con el c¨®nsul general de Espa?a en Nueva York, Manuel Sasot. El Ministerio espa?ol de Asuntos Exteriores envi¨® oficialmente a la celebraci¨®n desde Madrid a uno de sus diplom¨¢ticos, el ex dirigente comunista Carlos Alonso Zald¨ªvar, que hoy ocupa un puesto en el gabinete del ministro. La presencia de los diplom¨¢ticos espa?oles fue ovacionada por los veteranos y los asistentes al acto, as¨ª como la de un representante de la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

El cantante de folk Pete Seeger, uno de los ¨ªdolos de la generaci¨®n de la protesta norteamericana, y otros artistas que apoyan las causas de la izquierda desempolvaron las canciones de la guerra civil, que fueron coreadas por los asistentes. Resultaba curioso escuchar en espa?ol, en el Lincoln Center, a centenares de norteamericanos cantando Los cuatro generales, Ay Carmela, Si me quieres escribir o El quinto regimiento. Mediante un montaje audiovisual, fue presentada la historia de la brigada Lincoln, su primera acci¨®n en combate en la defensa de Madrid, la batalla del Jarama, Brunete, Teruel y el ¨²ltimo esfuerzo del cruce del Ebro. Las apariciones de Dolores Ib¨¢rruri y, en especial, su discurso de despedida, en Barcelona, a las brigadas internacionales, provocaron los mayores aplausos.