EE UU conf¨ªa en que la ca¨ªda de Silva Herzog no impedir¨¢ un acuerdo entre M¨¦xico y el FMI

La Administraci¨®n y la banca norteamericanas conf¨ªan en que el cese de Jes¨²s Silva Herzog como ministro de Finanzas de M¨¦xico no impedir¨¢ un pr¨®ximo acuerdo entre dicho pa¨ªs y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que evite una peligrosa declaraci¨®n unilateral de impago de su deuda externa de 97.000 millones de d¨®lares. El presidente de la Reserva Federal, Paul Volcker, y el secretario del Tesoro, James Baker, han declarado que no hay nada que indique que la designaci¨®n de un responsable de las finanzas de M¨¦xico, Gustavo Petricoli, a quien se considera un tecn¨®crata, formado tambi¨¦n en Yale, como Silva Herzog, vaya a suponer un cambio en la estrategia de buscar una soluci¨®n negociada con los acreedores internacionales y el FMI.

Las circunstancias que han rodeado la ca¨ªda de Silva Herzog y la crisis pol¨ªtica interna en el Gobierno mexicano que parece reflejar provocaron alarma en Estados Unidos, Silva Herzog era el hombre de confianza de Washington, y hab¨ªa llevado de una forma muy ortodoxa toda, la crisis econ¨®mica de M¨¦xico desde 1982, propiciando siempre acuerdos con los acreedores internacionales. En un principio se temi¨® que los nacionalistas, partidarios de suspender el pago de los intereses de la deuda alegandilo que M¨¦xico no puede seguir haciendo m¨¢s sacrificios, iban a lograr imponer su estrategia de no admitir las dr¨¢sticas reformas que exige el FMI. Banqueros en Nueva York -la banca estadounidense posee el 25% de la deuda externa de M¨¦xico- dijeron ayer, sin embargo, que un acuerdo de principio con el Fondo Monetario Internacional es "cuesti¨®n de d¨ªas".No todos los observadores se muestran tan optimistas, y algunos temen que, por razones pol¨ªticas, el nuevo equipo negociador mexicano exija concesiones especiales al. FMI y a los bancos, que no se consideren aceptables. Subsiste tambi¨¦n la incertidumbre en Washington sobre la permanencia en el poder de los hombres de Silva Herzog -claves en la negociaci¨®n-: el gobernador del Banco de M¨¦xico, Miguel Mancera, y el jefe del equipo negociador de la deuda, ?ngel Guria.

Volcker afirm¨® ante un comit¨¦ del Congreso que no ve signos de que M¨¦xico vaya a declarar una moratoria, ni siquiera, temporal (1.800 millones de d¨®lares en intereses de la deuda vencen el 1 de julio), y confi¨® en que "pronto" habr¨¢ un acuerdo. Sin embargo, el presidente de la Reserva Federal, que negoci¨® hace 10 d¨ªas un principio de acuerdo con Silva Herzog en un viaje secreto que realiz¨® a M¨¦xico, advirti¨® al Congreso que M¨¦xico y otros pa¨ªses latinoamericanos se est¨¢n agotando en su lucha por pagar sus deudas externas. Volcker explic¨® que la salida de la negociaci¨®n con M¨¦xico ser¨¢ muy importante para ver c¨®mo Brasil y Argentina pagan su deuda y llevan a cabo reformas econ¨®micas internas.

Acusaciones de fraude

El presidente de la Reserva Federal (el Banco Central) elogi¨® algunas de las reformas emprendidas por M¨¦xico, actitud que contrasta con las denuncias que ese pa¨ªs est¨¢ recibiendo en unas audiencias celebradas en el Congreso, donde el senador Jesse Helms afirm¨® esta semana que Miguel de la Madrid fue elegido presidente de la Rep¨²blica gracias a un fraude electoral.El tama?o del d¨¦ficit, p¨²blico de M¨¦xico -el FMI exige su reducci¨®n del actual 13% al 6% del producto interior bruto-es el principal escollo con que tropieza un acuerdo entre el Gobierno mexicano y la instituci¨®n econ¨®mica internacional, sin el cual la banca comercial no dar¨¢ nuevos cr¨¦ditos a M¨¦xico. Si se alcanza una soluci¨®n, M¨¦xico podr¨ªa obtener un rescate financiero de unos seis millones de d¨®lares a cargo del Banco Mundial, el FMI e incluso algunos Gobiernos occidentales. Sin embargo, Volcker descart¨® la posibilidad de un cr¨¦dito puente de EE UU a M¨¦xico.