El fin de los 'tarugos'
El canibalismo entre las industrias farmac¨¦uticas puede llegar incluso a poner zancadillas al competidor, promoviendo investigaciones que invaliden con raz¨®n o sin ella el producto rival, aunque finalmente sea rehabilitado por las autoridades sanitarias. La pol¨ªtica agresiva de los visitadores en su trato con los m¨¦dicos es una consecuencia m¨¢s de esta guerra por sobrevivir. No obstante, "est¨¢ desapareciendo el tarugueo [ofrecer comisiones a los m¨¦dicos por recetar sus productos]. Se trata de una f¨®rmula en extinci¨®n, s¨®lo ejercida por empresas d¨¦biles, conocidas como tarugos, que hoy no tienen el menor porvenir frente a los laboratorios que investigan y que gozan de prestigio".Pedro Lorenzo Fern¨¢ndez, jefe del departamento de Farmacolog¨ªa de la Universidad Complutense, asegura que en Espa?a la investigaci¨®n es escasa. La mayor¨ªa de los laboratorios espa?oles son meros "envasadores y vendedores", salvo excepciones como Esteve o Amirall. "La dependencia de las multinacionales es total". Welcome, por ejemplo, que en Espa?a se encuentra vinculado a Gayoso, dedica importantes contingentes a la investigaci¨®n en su casa central, pero no aqu¨ª. Sandoz, Astra, Glaxo, MSD y Upjohn no descuidan la investigaci¨®n en sus respectivos centros de operaciones, pero en Espa?a s¨®lo se conocen sus consecuencias comerciales.
Con frecuencia estos poderosos imperios fagocitan a las empresas nacionales por la v¨ªa del consorcio mixto o la compra literal.
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