Cerco en Ria?o
DOS COMPA?IAS de la reserva de la Guardia Civil cercaron ayer Ria?o para proteger la operaci¨®n de desalojo y derribo de las viviendas que permitir¨¢ la culminaci¨®n de las obras del embalse que ha de anegar esta zona leonesa. Cinco personas fueron detenidas, seis j¨®venes encaramados en los tejados fueron desalojados a golpes de bote de humo; los comercios, bancos y bares de la localidad cerraron en se?al de protesta, y un helic¨®ptero supervis¨® la operaci¨®n controlando desde el aire los movimientos de los vecinos y de los informadores presentes.Una estampa como ¨¦sta podr¨ªa parecer extra?a en un medio tan buc¨®lico como el valle de Ria?o. Pero escenas como la de ayer, con enfrentamientos y cargas policiales, vienen siendo desde hace tiempo algo habitual en sus calles. La hora de la verdad se acerca inexorablemente para sus habitantes, tras los 20 a?os en que se ha prolongado la obra principal del embalse. El proyecto inicial fue aprobado en 1965, y las obras se iniciaron en 1966, se detuvieron en 1970, se reanudaron de nuevo en 1971 y finalizaron en 1975. Entre tanto, los vecinos fueron indemnizados por la expropiaci¨®n forzosa de sus viviendas. En 1983, la Junta de Castilla y Le¨®n decidi¨® impulsar las obras complementarias del embalse hasta la total culminaci¨®n del proyecto. Es en este momento cuando se inician las acciones de protesta de los habitantes de Ria?o y el confuso debate sobre las razones a favor y en contra del proyecto.
Los que est¨¢n a favor hablan de los beneficios inmediatos que reportar¨¢ la explotaci¨®n de los recursos naturales de las 83.000 hect¨¢reas de terreno que podr¨¢n ser regadas con las aguas del embalse, am¨¦n de la eliminaci¨®n de los da?os catastr¨®ficos con que todo r¨ªo peninsular no regulado amenaza cada a?o. A?aden que el embalse es una pieza imprescindible para luchar contra los tres males que asfixian la agricultura espa?ola: su geografia atormentada, su bajo desarrollo tecnol¨®gico y el clima seco donde se desarrolla.
Quienes est¨¢n en contra, aparte de las proclamas llenas de buena intenci¨®n, pero excesivamente ret¨®ricas, afirman que el embalse es un salto en el vac¨ªo sin garant¨ªas reales de viabilidad econ¨®mica, que ha sido reanudado sin efectuar ning¨²n estudio actualizado sobre su oportunidad. Se trata, seg¨²n esta opini¨®n, de un proyecto antiguo, iniciado hace ya m¨¢s de 20 a?os, que responde a planteamientos de ¨¦pocas pasadas, con una situaci¨®n pol¨ªtica y con necesidades econ¨®micas diferentes a las actuales.
Los vecinos, cuya voz apenas se ha escuchado, con independencia de la raz¨®n que les ampare, se refieren a planes alternativos al embalse, como la construcci¨®n de peque?as presas y el aprovechamiento de las aguas subterr¨¢neas. El Gobierno, responsable pol¨ªtico ¨²ltimo de la operaci¨®n, ha permanecido hasta ahora pr¨¢cticamente mudo, cuando ser¨ªa obligado conocer cu¨¢les son las razones poderosas que existen para sacrificar a un pueblo, oblig¨¢ndole a cambiar de h¨¢bitat, adem¨¢s de trastocar el entorno natural que le ha configurado generaci¨®n tras generaci¨®n.
Lo que ha esperado lustros, puede esperar un par de semanas m¨¢s. El desalojo de Ria?o se ha convertido en un problema de orden p¨²blico, y eso ser¨ªa raz¨®n suficiente para que el Gobierno adopte una tregua en la acci¨®n y abra un debate con perjudicados y t¨¦cnicos, buscando una salida final razonable al asunto. No basta que el Gobierno est¨¦ plenamente convencido de la bondad del proyecto, sino que tiene el deber de explicar los fundamentos de su decisi¨®n, aunque ¨¦sta est¨¦ amparada por la ley. El recurso a las fuerzas antidisturbios de la Guardia Civil para imponer las decisiones en la pol¨ªtica de obras p¨²blicas y medio ambiente no constituye, a primera vista, el mejor m¨¦todo. Un Gabinete que se autocomplace en el amplio apoyo popular que le dieron las urnas y que se dice representativo de los sectores menos protegidos de la sociedad no puede echar a beneficio de inventario las protestas y las reivindicaciones de los ciudadanos. Con independencia de la viabilidad de sus pretensiones.
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