La mayor¨ªa de los espa?oles afronta el nuevo a?o con confianza en el futuro

Para el conjunto de los espa?oles, dinero y tiempo son las carencias m¨¢s importantes. La falta de salud y, sobre todo, de cari?o, es mencionada en cambio por porcentajes netamente m¨¢s bajos. La falta de dinero es mencionada como la principal carencia por los m¨¢s j¨®venes (47% de los de 18 a 25 a?os), la de tiempo por los de edad media (49%. de los espa?oles de 26 a 35 a?os) y la de salud por los de m¨¢s edad (43% de los de m¨¢s de 60 a?os). La falta de cari?o resulta ser una carencia poco sentida en nuestra sociedad en su conjunto, si bie n resulta ser la m¨¢s mencionada (31%) por un concreto y espec¨ªfico grupo de espa?oles: los divorciados/as.En este contexto, resulta interesante comparar las respuestas dadas a esta pregunta por las mujeres espa?olas con las que dieron hace dos a?os, a una pregunta muy parecida, las mujeres francesas.

Los datos parecen sugerir que las mujeres espa?olas, en conjunto, andan algo peor de tiempo, y algo mejor de cari?o y dinero, que las mujeres francesas.

La comida favorita de los espa?oles entrevistados, seg¨²n porcentajes, es: paella, 16%; carne, 7%; pescado., 6%; mariscos, 5%; arroz, 5%; cocido, 5%; verduras, 5%; pollo, 4%.; macarrones, 3%; cordero, 3%; canelones, 2%; fabada, 2%; patatas, 2%; sopa, 2%; caldo gallego, 2%; huevos con patatas fritas, 2%.; potaje, 1% legumbres, 1 %; tortilla espa?ola, 1% migas, 1 %; croquetas, 1 %; ensalada, 1%; esp¨¢rragos, 1%; dulces, 1%; otros, 4%. ,Y las frutas m¨¢s apetecidas: naranja, 24%; manzana, 12% pl¨¢tano, 10%0; mel¨®n, 7% pera, 6%; melocot¨®n, 5%; uvas, 5%; chirimoya, 4% fresas, 3% pi?a, 3%; sand¨ªa, 1%; mandarina, 1% granada, 1%; kiwi, 1%; otros, 4%; NS/NC, 14%.

La imagen que refleja el Rey es altamente positiva, incluso cordial, por encima de las opciones pol¨ªticas concretas. As¨ª se desprende de la alta frecuencia de respuestas (casi 80%.), el porcentaje m¨ªnimo de comentarios negativos (2%), el contenido de las respuestas y el tono con que fueron expresadas. Confirmando lo ya puesto de relieve por estudios anteriores el Rey se aparece a los espa?oles como una especie de valedor ¨²ltimo, de suprema instancia salvadora, que, no obstante, inspira m¨¢s sentimientos de relajada y afectuosa familiaridad que de intimidaci¨®n, envaramiento protocolario o temor reverencial.Texto literal de algunas respuestas curiosas:

-Probablemente disparates.

-?Madre m¨ªa! -Que lo deje.

-Lo est¨¢s haciendo de miedo.

-Que cobrara menos.

-Le pedir¨ªa prestado uno de sus coches.

-Que le prestase su barco.

-Que yo soy republicano.

-Que quite la mili.

-Que ¨¦l vive mejor que yo.

-Que hable mejor.

-Que viviera Franco otra vez.

-Que se la est¨¢n dando.

-Que le mandara dinero.

-Que vigile a Espa?a y al Gobierno.

-Que me devolviera la juventud.

-Que espabile al Gobierno.

-?Paciencia!

-?Hola amigo!

-Que le deje el coche que le han regalado.

-?Qu¨¦ grande eres!

-Que quitara al PSOE.

-J¨®dete por lo que te ha tocado.

-M¨¢s marcha a Espa?a.

-?Hola, Charly!

-Que ¨¦l me preguntase a m¨ª.

-Que me haga presidente.

-Que me har¨¦ terrorista.

-M¨¢s justicia, orden y autoridad; cierre temprano de bares.

-?Cuidado con los militares!

- Uno de cada tres espa?oles gasta en Navidad el doble o m¨¢s que en los meses ordinarios del a?o. Y, aunque casi todo el mundo gasta m¨¢s en el mes de diciembre, hay uno de cada cinco de nosotros que gasta m¨¢s del doble que en los meses 'corrientes.- En regalos de Navidad hay uno de cada dos espa?oles (48%) que gasta m¨¢s de 10.000 pesetas y uno de cada cinco que gasta m¨¢s de 20.000. Donde m¨¢s se gasta en regalos es, como puede esperarse, en las regiones m¨¢s ricas, como Catalu?a, Pa¨ªs Vasco o Madrid. Y dentro de cualquier tipo de regi¨®n, en los n¨²cleos urbanos de m¨¢s de 100.000 habitantes.

- La cuesta de enero constituye un problema serio para uno de cada 10 espa?oles, y m¨¢s leve para un 38%. La otra mitad de -la sociedad no parece sufrirla, ya que los gastos extraordinarios que hacen en la Navidad no les crean ning¨²n problema econ¨®mico en el mes de enero. En algunas de las regiones m¨¢s pobres -como Andaluc¨ªa, La Mancha o Canarias- se refleja con mayor frecuencia que en el resto esta angustia de la cuesta de enero. Lo que sin duda puede esperarse. Sin embargo, interesa resaltar que los problemas de la cuesta de enero aparecen con pr¨¢cticamente igual frecuencia entre las personas de las distintas clases sociales. Y tampoco existen diferencias significativas entre los individuos de distinta edad. As¨ª es que la tendencia a gastar en estos d¨ªas por encima de las propias posi- bilidades parece estar distribuida al azar entre los distintos sectores sociales. O, dicho de otra forma, que los que se endeudan m¨¢s lo hacen en la misma proporci¨®n, aunque, claro est¨¢, de acuerdo a los recursos de base que tienen.

El pesimismo econ¨®mico de principios de la d¨¦cada comienza a superarse en 1986. Hay un sentimiento creciente de que tanto la econom¨ªa nacional como las econom¨ªas familiares est¨¢n mejorando. La valoraci¨®n de las econom¨ªas dom¨¦sticas ha mejorado un 30% s¨®lo en el segundo semestre de 1986. Y si comparamos con la situaci¨®n de hace dos a?os, la valoraci¨®n positiva se ha incrementado en un 100% o incluso m¨¢s, seg¨²n el indicador que se utilice (as¨ª, por ejemplo, el cociente entre la actitud optimista y la pesimista respecto del futuro econ¨®mico personal se ha multiplicado por m¨¢s de ocho veces entre 1984 y 1986, y casi por dos entre el primero y el segundo semestres de 1986).

Los sectores que ven con mayor optimismo Su futuro econ¨®mico personal son, por un lado, los empleados de oficina tanto privados como p¨²blicos, y, por otro, los que no dependen de sueldos y salarios en el nivel medio de la sociedad (profesionales liberales, vendedores y trabajadores independientes ... ). El optimismo de los votantes PSOE y PCE se sit¨²a por encima de la media (40%); los de CP est¨¢n en la media, y los dem¨¢s, por debajo.

La valoraci¨®n de la situaci¨®n econ¨®mica nacional tambi¨¦n es hoy m¨¢s positiva que hace unos a?os, y su tendencia coyuntural tambi¨¦n es al alza, aunque el indicador vaya a distancia de la situaci¨®n familiar o personal. La situaci¨®n de la naci¨®n se suele ver m¨¢s negativa que la del propio hogar.

La valoraci¨®n que hacen los votantes del PSOE de la econom¨ªa nacional est¨¢ por encima de la media en, la misma proporci¨®n en que est¨¢ por deba o la de los votantes de la CP

(4-3 puntos) pero es mucho mayor el optimismo respecto del futuro entre el electorado socialista (40%) que entre los populares (20%), siendo la media nacional del 27%.

Realizado por el instituto Demoscopia bajo la direcci¨®n de los soci¨®logos Rafael L¨®pez Pintor y Jos¨¦ Juan Toharia, catedr¨¢ticos de la Universidad Aut¨®noma de Madrid. Encuesta a una muestra de 1.200 personas mayores de 18 a?os y de ambos sexos, representativa d¨¦ la poblaci¨®n residente en la Pen¨ªnsula, Baleares y Canarias. Con un nivel de confianza del 95,5% y un error de m¨¢s menos 2,7 para datos globales. Trabajo de campo realizado entre los d¨ªas 12 y 18 de diciembre mediante entrevistas a domicilio, con selecci¨®n final de entrevistados por ¨¦l sistema de rutas aleatorias. Proceso de datos en ODEC-Unitec.