Caballeros maestrantes

JUAN M?NDEZ Maestros del arte de la jineta fundaron en 1670,'bajo el reinado de Carlos II la Real Maestranza de Caballer¨ªa de Sevilla, en la iglesia de San Hermenegildo. Esta corporaci¨®n nobiliaria naci¨® tras la conquista, de Sevilla por el rey Fernando III, tras la cual el santo monarca inst¨® a sus caballeros para que se mantuvieran dispuestos en las artes de la guerra. Desde entonces, y despu¨¦s de que Felipe V nombrara a su hijo, el pr¨ªncipe de Parma, hermano mayor de la Maestranza de ah¨ª el nombre del palco y puerta del coso-, la corporaci¨®n sevillana conserva su tradici¨®n real, que hoy encabeza el conde de Barcelona, don Juan de Borb¨®n.

Hoy d¨ªa, la Maestranza sevillana conserva su estirpe nobiliaria. Sus 230 miembros proceden de aquellos caballeros que se ejercitaban a caballo frente a los toros. Entre ellos, s¨®lo una mujer, Mercedes Guajardo, Fajardo, marquesa viuda de las Navas de Navarra, tiene el t¨ªtulo de maestrante.

Nace el toreo

Fue esa pr¨¢ctica caballeresca la que uni¨® la tauromaquia a la Maestranza,y de los chulos que ayudaban a los jinetes para poner en suerte al toro nacieron los primeros toreros de a pie. Esos primeros adiestramientos eran ya espect¨¢culos p¨²blicos. Primero en una plaza cuadrada, que poco despu¨¦s se hizo cuadrilonga, y que en 1762 se convirti¨® en la plaza de toros de la Real Maestranza de Caballer¨ªa de Sevilla.

Ser maestrante supone, ¨¢dem¨¢s de la estirpe nobiliaria, una situaci¨®n personal, moral y cultural. Para ingresar en la Real Maestranza a¨²n existen peticiones de aquellos en cuyo ¨¢rbol geneal¨®gico se encuentra un miembro nobiliario que perteneciera en su d¨ªa a la corporaci¨®n.

Las peticiones para ingresar pasan por la junta de gobierno, que, presidida por el hermano mayor, concede o no el ingreso del aspirante. Dicha junta, que preside don Juan de Borb¨®n, o en su lugar un sill¨®n vac¨ªo, tiene nueve miembros: un teniente de hermano mayor, que en la actualidad es Luis Manuel Halc¨®n, conde de Pe?aflor; un fiscal; dos diputados propiedades, primero y segundo; el secretario; un clavero o tesorero; un archivero; el diputado de plaza, y el diputado de m¨²sica, a cuyo cargo est¨¢ la Casa de la Maestranza.

De los fines que crearon la Maestranza s¨®lo queda la protecci¨®n del arte ecuestre y el deporte h¨ªpico. De la financiaci¨®n de campa?as militares en ?frica y Cuba se ha pasado al patrocinio de obras culturales y ben¨¦ficas. Mantener la plaza y promocionar la fiesta del toro son sus objetivos m¨¢s sagrados. Para ello, todos los a?os se restaura la plaza.

Todo ello se financia a trav¨¦s de la cesi¨®n de la plaza a la empresa Pag¨¦s, detr¨¢s de la cual, Pedro Bala?¨¢ act¨²a como verdadero empresario. De ella, la Maestranza recibe un 20,38%,, en concepto de alquiler del coso y oficinas. Para el maestrante s¨®lo queda el derecho de serlo y tener un lugar privilegiado para presenciar los festejos.