Sesgo significativo en la informaci¨®n que se da en la RFA

Enorme expectaci¨®n y un significativo sesgo en la informaci¨®n al respecto caracterizan el inter¨¦s despertado en la Rep¨²blica Federal de Alemania por el juicio contra Klaus Barbie que comenz¨® ayer en Ly¨®n.El inter¨¦s es l¨®gico. Se trata de un juicio contra un alem¨¢n nacido en Bad Godesberg, cerca de la actual capital federal, implicado en cr¨ªmenes detestables cometidos en nombre del pueblo alem¨¢n. Una vez m¨¢s, 42 a?os despu¨¦s de la guerra, los alemanes tienen que enfrentarse con su pasado nacionalsocialista y con las vilezas cometidas por muchos que, como Barbie, insisten en haberse limitado a "cumplir con su deber".

La ampl¨ªsima cobertura informativa de los preparativos del juicio en la televisi¨®n, radio y Prensa de la RFA ha estado sin embargo centrada en la "componente francesa" de la actuaci¨®n de Barbie como jefe de la Gestapo, especialmente en la red. de colaboraci¨®n que ¨¦ste logr¨® establecer entre ciudadanos franceses traidores a la resistencia y denunciantes de toda ¨ªndole. Los medios alemanes parecen haber aceptado de antemano las tesis del abogado defensor de Barbie, Jacques Verg¨¦s, que quiere convertir este proceso en una denuncia del colaboracionismo y del "mito de la resistencia".

Los alemanes han aceptado a Francia como cuarta potencia vencedora en la II Guerra Mundial, m¨¢s en virtud de la constituci¨®n del eje Par¨ªs-Bonn que por convicci¨®n hist¨®rica, ya que, consideran que Francia fue liberada por brit¨¢nicos y norteamericanos y que la resistencia que all¨ª hubo fue menor que la protagonizada en Polonia.

Ahora, con el juicio a Barbie, algunos alemanes no pueden evitar una cierta satisfacci¨®n al ver que tambi¨¦n los franceses tienen que enfrentarse con los aspectos mas vergonzantes de su historia. Dado que la culpabilidad de Barbie no ofrece duda alguna, los medios alemanes han centrado su inter¨¦s en los actos de complicidad francesa con la ocupaci¨®n nazi y en la responsabilidad del r¨¦gimen t¨ªtere de Vichy.

Grotesco es en todo caso que se sugiera la complicidad con Barbie de franceses que delataron a compa?eros tras ser sometidos a tortura por la, Gestapo en Ly¨®n, sabidos los m¨¦todos utilizados por este cuerpo de polic¨ªa secreta alemana.

Los intentos del abogado Verg¨¦s de buscar paralelismos entre las atrocidades nazis y las cometidas por Francia en Argelia llegan en buen momento para todo un grupo de historiadores conservadores alemanes que, con clara complacencia de sectores del Gobierno federal, niegan el car¨¢cter ¨²nico a los cr¨ªmenes del nazismo y buscan paralelismos con los llevados a cabo bajo el dictado de Stalin.