El fin de la pesadilla

M¨¢s all¨¢ de los troncos, hierros y traviesas, Agust¨ªn Ibarrola se ha visto agasajado por innumerables personajes ilustres que pertenecen a las tendencias m¨¢s diversas del espectro pol¨ªtico vasco. Porque, en la exposici¨®n antol¨®gica de Bilbao, Agust¨ªn y su inseparable Mari Luz estuvieron acompa?ados por un c¨ªrculo mucho m¨¢s amplio que el conformado por sus incondicionales.Todas las autoridades, todas, se dieron cita en el Museo de Bellas Artes para saludar al artista. Casi todos los candidatos a alcalde, representantes del Gobierno central y vasco, nacionalistas y socialistas e incluso algunos de los que hasta hace muy poco tiempo hablaban de Ibarrola como el "pecero" y el "espa?ol" han reconocido el trabajo del creador vizca¨ªno.

Y es que a nadie se le escapa que el artista inaugur¨® su exposici¨®n el pasado viernes, cuando ya la carrera electoral hacia el Ayuntamiento se ha iniciado a un ritmo vertiginoso. Queda la duda, ante tanto bombo y platillo, por saber cu¨¢l es la verdadera causa que ha provocado tan inusitado y tard¨ªo inter¨¦s por la obra de Ibarrola en los c¨ªrculos pol¨ªticos vascos. Ibarrola seguramente sinti¨®, con una gran dosis de asombro, que el pasado viernes finalizaba una larga pesadilla.