"Hay que alterar el reparto del presupuesto europeo"

ALEX GRIJELMO ?duard Punset ha cumplido 50 a?os, pero su sonrisa es a¨²n m¨¢s joven. Viaja continuamente por el mundo en avi¨®n, pero conduce un peque?o Peugeot 205. Tiene un curr¨ªculo. interminable, pero admira a Adolfo Su¨¢rez.

Siempre busc¨® aire en la pol¨ªtita. En los a?os cincuenta pas¨® su exilio en el PCE. Vivi¨® el comienzo de la transici¨®n en UCD y form¨® parte del Gobierno de unidad en la incipiente Generalitat de Josep Tarradellas. Despu¨¦s, en 1980, ser¨ªa ministro para relacionar a Espa?a con algo que entonces quedaba todav¨ªa lejos: las comunidades europeas. Cuando estall¨® su partido, tom¨® aire de nuevo, en una candidatura de Converg¨¨ncia, como independiente, y sali¨® elegido diputado. Poco despu¨¦s respiraba como secretario general de los nacientes Clubes Liberales, y finalmente se sumaba a pleno pulm¨®n al proyecto del CDS. Siempre abri¨¦ndose v¨ªas de aire.

Si jugase al rugby ser¨ªa medio apertura,. dada su especial predilecci¨®n por el inc¨®modo trabajo de desbrozar el camino. Y ha vuelto como candidato n¨²mero uno del CDS al Parlamento de Estrasburgo porque le gusta seguir empezando. Tal vez sin darse cuenta de que esto de ser diputado europeo es una forma de sucederse a s¨ª mismo.

El misterio de Su¨¢rez

Eduard Punset estudi¨® Derecho en Madrid -su padre, ampurdan¨¦s, quer¨ªa que hablase mejor el castellano- y Econ¨®micas en Inglaterra, Es maestro en Ciencias Econ¨®micas por la universidad de Londres, diplomado de la Secci¨®n Financiera de la universidad de Par¨ªs, ha vivido 10 a?os en Europa, habla cuatro idiomas, ha ocupado importantes cargos ejecutivos en bancos y empresas, toca el piano, tiene publicados cinco ensayos, las estanter¨ªas de su casa siempre estuvieron repletas de libros. Es un hombre culto.

"?Qu¨¦ puede admirar en Adolfo Su¨¢rez alguien como usted?".

Y Punset amontona elogios respecto al papel de quien presidi¨® la transici¨®n. Despu¨¦s a?ade: "Su¨¢rez, desde el primer momento, entendi¨® que en una democracia lo decisivo son los votos. Esto parece una perogrullada, pero todav¨ªa hay sectores sociales que cavilan con altemativas de laboratorio".

"S¨ª, pero hablemos del presente. ?En qu¨¦ consiste el misterio del presidente del CDS para que usted le reconozca esa autoridad moral y pol¨ªtica?". "En que ha demostrado", responde, "que contra viento y marea es capaz de impulsa¨ª un proceso de reforma social y democr¨¢tica. Y esto en cualquier pa¨ªs europeo es el principal activo que tiene un pol¨ªtico. Un Gobierno se puede hundir, pero los buenos pol¨ªticos vuelven".

En realidad, Punset tambi¨¦n ha vuelto. Vuelve a Europa. (Sigue funcionando ese mecanismo. metalingu¨ªstico, como si Espa?a no fuera Europa). "Ahora podr¨¦ decir en Europa lo mismo que hace a?os dec¨ªa como s¨²bdito de un pa¨ªs no democr¨¢tico o, despu¨¦s, de un pa¨ªs no integrado en la Comunidad; pero ahora lo dir¨¦ en igualdad de condiciones".

Un presidente elegido

Por ejemplo, dir¨¢ que hay que emprender una nueva democratizaci¨®n en la Comunidad, y que, por tanto, la Comisi¨®n Europea debe someterse a investidura por el Parlamento de los doce, que el presidente de ese Gobierno europeo ha de ser elegido en un futuro por sufragio universal, que la Asamblea precisa un car¨¢cter menos consultivo -y m¨¢s vinculante, y que el presupuesto comunitario -que es aprobado por el Parlamento europeo- tiene que cambiar de dise?o.

"En lo que Espa?a es m¨¢s competitiva, en un 60% de nuestra producci¨®n agraria, es donde est¨¢ el peso del presupuesto, que va a proteger producciones de pa¨ªses n¨®rdicos que de otra manera no ser¨ªan competitivas. Y resulta que en lo que somos m¨¢s d¨¦biles, depauperados, como en investigaci¨®n, nuevas tecnolog¨ªas..., a eso el Mercado Com¨²n s¨®lo dedica un 3% y esto sin entrar en el problema de los desequilibrios regionales, a los que dedica un 13%. Hay que alterareste reparto, y buscar nuevos recursos. Nosotros sugerimos que la contribuci¨®n de cada pa¨ªs se haga no en funci¨®n del IVA sino en funci¨®n de su producto interior bruto, de modo que el que m¨¢s tenga m¨¢s aporte".

El candidato del CDS vislumbra un mundo donde los Gobiernos centrales van a ver debilitados sus poderes porque ¨¦stos se ir¨¢n desplazando: hacia abajo, a las regiones y a los ayuntamientos; hacia arriba, a los organismos supranacionales como la Comunidad Europea. Y ¨¦l acaba de apuntarse al futuro, otra vez, para volver a seguir.