Despu¨¦s del horror, la renovaci¨®n
Los psiquiatras franceses Corbin y Lafont consideran que el per¨ªodo de Vichy fue un gran revulsivo que oblig¨® a muchos m¨¦dicos a replantearse su trabajo. "La renovaci¨®n psiqui¨¢trica que se produce en Francia a partir de los a?os cincuenta tiene su origen en la reacci¨®n ante el horror", aseguran, "pero tambi¨¦n en algunas aportaciones importantes, como la de Francesc Tosquelles".Francesc Tosquelles es un m¨¦dico catal¨¢n, nacido en 1913 y hoy jubilado, que fue jefe del servicio psiqui¨¢trico del Ej¨¦rcito republicano durante la guerra civil y lleg¨® a Francia exiliado en 1939, con la cabeza llena de ideas y una larga experiencia de renovaci¨®n psiqui¨¢trica en el Instituto Pere Mata, de Reus, y en el propio Ej¨¦rcito. "Entonces lo sab¨ªa todo de la psiquiatr¨ªa", dice uno de los testimonios recogidos por Lafont, "y nos lo ense?¨® a nosotros, pues ven¨ªa de uno de los pocos rincones de Europa donde se hac¨ªa psiquiatr¨ªa, cerca de Barcelona, con un tal Mira. Llevaban a la gente a la playa. ?Os dais cuenta?". Tosquelles se refugi¨® en uno de los pocos asilos donde no lleg¨® el exterminio, pues m¨¦dicos y enfermos se organizaron bajo su influencia, vencieron el hambre, e incluso ayudaron a la Resistencia. "Saint Alban", dice en la tesis uno de los testimonios, "es un crisol, una matriz. ( ... ) Es una historia m¨¢s que privilegiada en la que se mezclaban los comunistas, los superrealistas, los cristianos progresistas, y luego Tosquelles, que estaba refugiado y se integr¨® en el equipo para pensar de nuevo todos los conceptos psiqui¨¢tricos".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.