Un senegal¨¦s muri¨® el lunes apu?alado en la calle de Orense
Los due?os de los 'pubs' contratar¨¢n guardias privados para reforzar la seguridad en Azca
Los propietarios de pubs del la zona de la calle de Orense de Madrid han decidido contratar guardias privados de seguridad, dentro de una campa?a para contrarrestar la imagen que sufre el barrio. En esa calle, tres personas han muerto en los ¨²ltimos seis d¨ªas a manos de delincuentes. La ¨²ltima v¨ªctima ha sido un ciudadano senegal¨¦s de 25 a?os, Ngagne Dioup, quien falleci¨® apu?alado. La delegada del Gobierno en Madrid, Ana Tutor, ha anunciado que prepara un plan de reforzamiento de la seguridad en Azca.
Las otras dos muertes ocurrieron el d¨ªa 10, cuando un comisario de polic¨ªa fue asesinado a tiros; y el d¨ªa 14, fecha en que muri¨® apu?alado un joven de 16 a?os. No obstante, fuentes policiales matizan que el asesinato del comisario ocurri¨® en la zona norte de la calle, alejada del lugar donde fueron cometidos los otros dos cr¨ªmenes, y que no parece tener relaci¨®n con la conflictividad en los subterr¨¢neos de Azca.A las 21.50 del lunes, mientras apu?alaban en la regi¨®n lumbar superior a Ngagne Dioup, comerciante ambulante, 30 propietarios de los pubs de Azca y Orense se reun¨ªan en los s¨®tanos para organizar una campa?a que contrarreste la imagen con la que ahora se asocia la zona. Entre los planes de los propietarios de pubs, discotecas y discobares figura contratar guardas de seguridad privados que patrullen los bajos de Azca; e instalar reflectores de luz, seg¨²n manifestaron Pablo Sacrist¨¢n y su socio, Rogelio, que asistieron a la reuni¨®n. La entidad que agrupa a los due?os de locales considera que falta polic¨ªa en la zona.
Un testigo presencial vio c¨®mo a la misma hora en que se celebraba la reuni¨®n un hombre blanco de pelo negro, de entre 24 y 27 a?os, vestido con una cazadora y unos pantalones vaqueros ajustados, le gritaba a un hombre negro que se daba a la fuga: "Aqu¨ª no vuelves a entrar t¨² a vender droga". Mientras el negro se re¨ªa, el blanco trataba de arrancar una de las barras de hierro que protegen un jard¨ªn situado ante el local. "Luego el blanco desapareci¨®", contin¨²a explicando el testigo presencial, .y al poco tiempo vi que el negro, que iba con una bolsa de deportes marr¨®n y un gorro de lana beis, volv¨ªa con algo de hierro de color verde en la mano". El blanco regres¨® y se fue hacia ¨¦l con algo "que me pareci¨® un stick de hockey". "Al negro ya no se le ve¨ªa, y pens¨¦ que no pasar¨ªa nada m¨¢s y me met¨ª en la porter¨ªa de mi casa". Pero el negro fue hallado muerto poco despu¨¦s.
[Fuentes de la Direcci¨®n General de la Polic¨ªa citadas por Efe se?alaron que en el pasado mes de enero se han registrado unos 85 hechos delictivos diversos en la zona de Azca y la calle de Orense].
La zona del centro comercial Azca es de d¨ªa un lugar de corbatas y bancos. Por la noche, en el pasillo subterr¨¢neo flanqueado por bares y discotecas, entre ginebras con coca-cola y aparatos de m¨²sica, aparecen navajas, barras de hierro y jeringuillas.
El chico del turno de noche de una pizzeria asegura que meterse en uno de los pubs subterr¨¢neos con m¨²sica funkie a las cuatro de la ma?ana es como visitar Harlem: "Hay m¨¢s negros que blancos". Este chico tiene clara la diferencia entre la clientela de d¨ªa respecto de la que va por la noche: se nota en el estado en que dejan el servicio.
Sobre la gente, uno de los due?os de pub dice que "no es para tanto", aunque a?ade que, como todo el mundo se puede imaginar, "es m¨¢s normal encontrar tomando copas entre semana a uno que est¨¢ fuera de la ley que a otro que entra en la oficina a las ocho de la ma?ana". Quien esto afirma tiene el hueso de un p¨®mulo deformado "por un talegazo" que le dieron "por intentar acorralar al que hab¨ªa partido el labio a la chica del guardarropa".
El tramo de 32 escalones que separa la superficie de la calle de sus subterr¨¢neos huele al or¨ªn de los perros de los ciudadanos que viven en este barrio y al de los que alivian la vejiga de cerveza. Javier, de 19 a?os, el chico de Burguer King, no dejar¨ªa pasear sola a su hermana, no vaya a ser que le pase como a la chica de los helados, que dej¨® este verano un momento su puesto para pasear por la plaza de Picasso y le quitaron hasta los pendientes.
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