Salud para Madrid

El Ayuntamiento de Madrid va a abordar bajo el lema Salud para Madrid un proyecto ambicioso cuyo ob ' jetivo no es solamente la mejora sustancial de las condiciones sanitarias de nuestra ciudad sino sobre todo contribuir a una nueva y progresista concepci¨®n de la salud.Como es sabido, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) ha elaborado, a partir de las nuevas concepciones de salud p¨²blica, la estrategia de Salud para Todos en el a?o 2000. Un grupo de ciudades, entre las que se encuentra Madrid, ha tomado la iniciativa de apoyar esa estrategia a trav¨¦s del Proyecto de Ciudades Saludables.

Una ciudad saludable -como pretendemos que sea la nuestra- es algo m¨¢s que una ciudad con buenos servicios sanitarios., Es aquella que dise?a su pol¨ªtica. sanitaria teniendo en cuenta que los progresos en el ¨¢rea de la salud tienen un techo en la pura aplicaci¨®n de la medicina cient¨ªfica. Diversos estudios demues-tran que, por ejemplo, la dr¨¢stica, reducci¨®n de la tasa de mortalidad de los ¨²ltimos 50 a?os ha sido debida sobre todo a las medidas ambientales, pol¨ªticas, econ¨®micas y sociales. La acci¨®n terap¨¦utica,, al lado de las anterior-es, ocupa un lugar secundario.

Sobre todo en los pa¨ªses desarrollados, las enfermedades infecciosas no son ni las m¨¢s frecuentes ni las m¨¢s letales. Las causas m¨¢s importantes de mortalidad son otras como las cardiopat¨ªas, el c¨¢ncer o incluso los accidentes. S¨®lo la irrupci¨®n del SIDA puede variar esta apreciaci¨®n, lo que en todo caso no restar¨ªa importancia a la necesidad de abordar pol¨ªticas relacionadas con la calidad de vida.

Se trata, pues, de poner el acento en el concepto promoci¨®n de la salud, extendiendo en este terreno la acci¨®n de los poderes p¨²blicos, actuando en muchas de las ¨¢reas de la vida cotidiana, persiguiendo al mismo tiempo la reducci¨®n de las desigualdades en un ¨¢mbito tan importante como es la vida.

Un proyecto como ¨¦ste lo es, naturalmente, a largo plazo. Conseguir estilos de vida saludables, prevenir los factores insalubres, garantizar la rehabilitaci¨®n a quienes hayan visto alterada su salud, son objetivos muy ambiciosos. Pero estamos convencidos de que no son imposibles. Para ello es necesaria la dedicaci¨®n de las instituciones, y a esa labor vamos a canalizar esfuerzos y medios. Pero no es suficiente: hace falta que los ciudadanos se vean involucrados en la tarea, que participen a trav¨¦s de sus asociaciones, que dinamicen y apliquen estas pol¨ªticas.

Actuar sobre la educaci¨®n, sobre la informaci¨®n, el desarrollo comunitario, la defensa jur¨ªdica y la propia legislaci¨®n sanitaria van a ser las v¨ªas de trabajo que emprenderemos, pero, repito, sin la participaci¨®n p¨²blica no ser¨¢n posibles avances espectaculares.

La propia concepci¨®n social de la salud -no entendida sim plemente como algo individual coloca a las ciudades como ¨¢mbito apropiado para ejercer esta pol¨ªtica. Las ciudades, el entorno en que se vive, influyen directamente en las condiciones de salud de sus habitantes.

De ah¨ª lo apropiado del ¨¢mbito de una pol¨ªtica sanitaria municipal en la que desde la vigilancia de una alimentaci¨®n adecuada a la garant¨ªa de la higiene p¨²blica, o de las condiciones de vivienda, se insertan de lleno en las competencias que la propia ley General de Sanidad otorga a las corporaciones locales en su art¨ªculo 42.

Pero es necesario adem¨¢s reexaminar estos y otros temas desde las perspectivas de la calidad social de vida. Y sobre todo con la intenci¨®n de dedicar el mayor esfuerzo a los sectores sociales m¨¢s desprotegidos. No podemos hablar de salud p¨²blica si no es salud para todos. ?se es nuestro objetivo, para el que esperamos la mayor contribuci¨®n de todos los madrile?os.