El ordenador de la guerra

Cuesta 3.000 millones de pesetas y a simple vista parece un juguete. Se trata del primer simulador de vuelo, fabricado en Espa?a, del Harrier-Bravo, el caza de despegue vertical que antes del verano llevar¨¢ el nuevo portaeronaves Pr¨ªncipe de Asturias, el futuro buque insignia de la Armada espa?ola. Un ni?o dar¨ªa cualquier cosa por una hora en ¨¦l porque para jugar a la guerra es perfecto. Si su alto coste no impidiera comercializarlo como tal juguete, seguro que batir¨ªa r¨¦cords de ventas. El aparato, una copia de la cabina del avi¨®n conectada a un sofisticado sistema de ordenadores, reproduce las circunstancias y sensaciones del vuelo en un avi¨®n de combate. Se trata de volar y hacer la guerra sin moverse del suelo.

Desde el pasado jueves, la Armada dispone en la base de Rota (C¨¢diz) del primer simulador espa?ol del avi¨®n Harrier, seis de cuyas unidades est¨¢n ya en poder del Grupo Aeronaval. El nuevo simulador consta de una c¨²pula o domo, en cuyo interior se halla una reproducci¨®n exacta de la cabina del avi¨®n, y el puesto del instructor. En la cabina est¨¢n los instrumentos reales: control de vuelo, paneles y sistema de armas.Estos elementos reproducen fielmente el funcionamiento de un avi¨®n real. En la c¨²pula, encerrado en la cabina, el piloto se encuentra ante im¨¢genes sintetizadas generadas por ordenador, que se proyectan en la propia c¨²pula, a manera de pantalla.

El instructor controla desde su monitor todas las operaciones que realiza el piloto. Se encuentra en una habitaci¨®n separada de la c¨²pula y comunicado permanentemente por radio con el piloto. Antes de iniciar el supuesto vuelo le indica en qu¨¦ condiciones climatol¨®gicas lo va a realizar y le da las instrucciones precisas para el despegue, adem¨¢s de resolverle las dudas que se le presentan sobre la marcha. Los mismos escenarios que se ver¨ªan en un vuelo real van siendo visualizados por el piloto.

Uno de los ensayos consiste en sobrevolar la base de Rota y buscar al portaeronaves Pr¨ªncipe de Asturias en alta mar, ya que una de las misiones principales de este caza reci¨¦n incorporado a la Armada es la defensa de su Grupo de Combate aeronaval. "Ve tranquilo", le aconseja el instructor, que desde su monitor comprueba la situaci¨®n exacta del avi¨®n respecto al barco.

Adem¨¢s del ruido del motor y del que produce el disparo de las armas, el asiento del piloto en el simulador, construido siguiendo las intrucciones de McDonnell Douglas, fabricante del avi¨®n, reproduce las mismas presiones sobre vientre, nalgas y espalda que se experimentan en vuelo real. "Son las mismas sensaciones que en un vuelo real", asegura uno de los t¨¦cnicos que han construido este simulador.

Entrada restringida

El simulador de vuelo del Harrier-EAV-8B o Harrier-Brave ha sido construido por la empresa espa?ola de alta tecnolog¨ªa Ceselsa, que tambi¨¦n fabric¨® el simulador de los nuevos F-18 del Ej¨¦rcito del Aire. La entrega del simulador para el Harrier, el pasado d¨ªa 28, fue encuadrada por los mandos de la Armada en la categor¨ªa de "rango de los acontecimientos". El simulador se encuentra instalado en un edificio de la base, al final de varios pasillos en los que se advierte que la entrada es restringida.Los oficiales-pilotos de la Armada, con sus monos verdes revestidos por vistosas insignias, son los privilegiados que aprender¨¢n y se entrenar¨¢n con el simulador. Son los que se encargar¨¢n de los 12 nuevos Harrier, fabricados en Estados Unidos, que integrar¨¢n la flotilla del Pr¨ªncipe de Asturias. Estos cazas sustituir¨¢n a los Harrier-Alfa, m¨¢s anticuados, pero que todav¨ªa siguen siendo operativos desde el viejo portaeronaves D¨¦dalo. El Pr¨ªncipe de Asturias realiza actualmente pruebas de mar en El Ferrol, donde ha sido construido y botado, y antes de verano efectuar¨¢ su primera singladura, lo que le convertir¨¢ inmediatamente en buque de guerra operativo.

Una vez que operativos los Harrier Bravo o Harrier 2, estos cazas constituir¨¢n el principal sistemas de disuasi¨®n de la Armada, por su capacidad para arrojar grandes cantidades de bombas y misiles a largas distancias. Aunque las posibilidades son muy diferentes de acuerdo con las misiones a realizar, el avi¨®n tiene una media de 600 kil¨®metros de radio de acci¨®n y puede transportar unos 7.000 kilogramos de bombas y misiles.

Habitualmente, los Harrier 2 portan un ca?¨®n de 30 mil¨ªmetros de calibre, bombas de diferentes clases -incluidas las guiadas por laser- y misiles aire/aire y aire/ superficie. EE UU, Reino Unido y Espa?a son los ¨²nicos pa¨ªses que disponen de ese clase de cazas.