Los Oppenheimer buscan una salida europea
La batalla que se librar¨¢ en torno a Consolidated Gold Fields supone, de un lado, la clara visi¨®n por parte del imperio controlado por la familia Oppenheimer sobre el futuro de algunos metales raros ubicados por la tecnolog¨ªa moderna en posici¨®n estrat¨¦gica, y del platino. Respecto de este ¨²ltimo metal la producci¨®n qued¨® por debajo de la demanda por tercer a?o consecutivo en 1987, y puede ocurrir lo mismo este a?o. Esto a pesar que la Uni¨®n Sovi¨¦tica increment¨® las exportaciones fuera de su ¨®rbita un 38%. El furor esta desatado. En 1986, Jap¨®n increment¨® sus importaciones de platino un 72%.Pero no s¨®lo es esto lo que est¨¢ en juego. Los analistas del sector suponen que Harry Oppenheimer -con 80 a?os de edad- y su hijo Nicholas, que maneja en Londres el brazo de De Beers que custodia el precio mundial de los diamantes, han llegado a la conclusi¨®n de que el futuro surafricano de su imperio puede no ser lo mejor, entre otras cosas por las sanciones antiapartheid.
Pese a haber quebrantado en 1987 una huelga de 50.000 mineros negros, Harry milit¨® activamente en la oposici¨®n antiapartheid hasta heredar sus posesiones en 1957. Recientemente Zach de Beer, un director general de Anglo, dej¨® la sociedad para unirse a la c¨²pula del Partido Liberal Progresista. Las relaciones con el gobernante Partido Nacional han sido tradicionalmente tensas.
Como parte del problema, el grupo controla todo lo que se puede controlar en su pa¨ªs, y tras a?os de ser uno de los inversores m¨¢s poderosos en los Estados Unidos es l¨®gica la aspiraci¨®n de mover la sede de la empresa, objetivo no declarado pero que puede ser un m¨®vil m¨¢s en la operaci¨®n.
En su pa¨ªs tiene fuertes participaciones en m¨¢s de 600 empresas y controla los dos grupos editoriales de prensa de habla inglesa m¨¢s importantes.
El imperio sigue bajo un estrecho control de la compa?¨ªa familiar E. Oppenheimer e Hijo, de la cual Minorco es el brazo luxemburgu¨¦s.
La decisi¨®n brit¨¢nica sobre la oferta r¨¦cord no ser¨¢ tarea f¨¢cil, pero la sombra monop¨®lica puede eclipsar las aspiraciones de la familia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Gesti¨®n empresarial
- Anglo American
- Consolidated Gold Fields
- Consejo administraci¨®n
- Metales preciosos
- Pol¨ªtica exterior
- Reino Unido
- Sud¨¢frica
- Pol¨ªtica comercial
- Europa occidental
- Uni¨®n Europea
- Europa
- Organizaciones internacionales
- Relaciones exteriores
- Empresas
- Econom¨ªa
- Comercio
- OPA
- Operaciones burs¨¢tiles
- Bolsa
- Mercados financieros
- Finanzas