Todav¨ªa manda Wall Street

La pasividad no suele considerarse como un resultado positivo, pero en esta ocasi¨®n los mercados de valores han obtenido de ella una tregua en su lucha con los abandonos de la inversi¨®n a corto plazo.Los primeros en apuntarse al dulce no hacer nada fueron los vendedores, que optaron por esta actitud ante los varapalos sufridos el d¨ªa anterior. El dinero fue tanteando el terreno y, al final de la sesi¨®n; el ambiente era un poco m¨¢s relajado que al principio, pues el papel pudo colocarse casi a la medida de las ¨®rdenes de compra que sal¨ªan al mercado, con lo que las cotizaciones no resultaron demasiado da?adas.

El nivel del negocio s¨ª que not¨® este cambio de orientaci¨®n, pero todo se dio por bueno ante la inminente el d¨¦ficit comercial norteamericano y la consiguiente reacci¨®n de Wall Street.

El cap¨ªtulo de las preocupaciones internas hay que incluir esa subida de un cuarto de punto en la rentabilidad de las letras M Tesoro cedidas a tres meses por el Banco de Espa?a, y el ajuste hasta el 11,40% en el precio de la subasta de pr¨¦stamos, datos que sirven para caldear el ambiente en tomo a la publicaci¨®n del IPC este pr¨®ximo fin de semana. El mercado interbancario tambi¨¦n experiment¨® un incremento en los tipos de inter¨¦s de todas sus operaciones.

Los recortes que se produjeron en esta jornada han tenido mayor incidencia en los grupos el¨¦ctrico, qu¨ªmico y de seguros, sufriendo los dem¨¢s peque?as bajas que permit¨ªan pensar en un alto en el cap¨ªtulo vendedor, pero el sector bancario volvi¨® a dar la de arena y empuj¨® definitivamente el ¨ªndice del lado negativo. Seis de los siete grandes segu¨ªan teniendo restos vendedores.