T¨¦ y gatos

Cuando Mar¨ªa Zambrano lleg¨® a Madrid en noviembre de 1984 trajo consigo a sus dos gatas, Blanquita y Gatiga. Dos compa?eras de sus ¨²ltimos a?os de exilio que murieron poco despu¨¦s de volver a Espa?a. Ahora tiene otras dos gatas j¨®venes que la acompa?an y se dejan acariciar por ella. Mar¨ªa Zambrano no recibe a muchos amigos. No recibe en su casa a otros intelectuales, aunque con frecuencia habla por tel¨¦fono con algunos amigos que hizo en el extranjero. Una costumbre que adquiri¨® durante su estancia en Ginebra. Desde su retorno vive algo aislada, principalmente a causa de las dificultades que tiene para desplazarse. No soporta estar mucho tiempo en la cama, se levanta temprano, bebe t¨¦ constantemente a lo largo del d¨ªa. Fuma, fuma mucho tabaco rubio ingl¨¦s con una larga boquilla. A veces recibe a algunos estudiosos de su obra. Siempre le ha gustado hablar, aunque ahora le cansa.Sin embargo, sigue trabajando, a su ritmo. Escribe actualmente un libro titulado Notas de un m¨¦todo, y las constantes revisiones de sus otros libros as¨ª como nuevos pr¨®logos a los mismos, la mantienen en actividad. Mar¨ªa Zambrano fue operada de cataratas hace unos a?os y tiene dificultades en la visi¨®n. Una persona le lee los libros y la prensa. Tras su vuelta a Espa?a tuvo verdaderos problemas econ¨®micos, ya superados. Ahora vive en su casa con dos primos suyos y la mujer de uno de ellos.