El Gobierno nombrar¨¢ un embajador para las negociaciones de desarme convencional

El Gobierno designar¨¢ en breve un embajador especial para encabezar las dos delegaciones que participar¨¢n de forma estable en las negociaciones que, como consecuencia de los acuerdos alcanzados en la Conferencia de Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (CSCE), se iniciar¨¢n el pr¨®ximo mes de marzo para debatir aspectos relacionados con el desarme convencional y con la adopci¨®n de medidas de confianza. Ser¨¢ la primera vez que Espa?a participe directamente en unas negociaciones de desarme.

Cada una de las dos delegaciones espa?olas en ambos foros estar¨¢ dirigida por un diplom¨¢tico con categor¨ªa administrativa de subdirector general. Los dos diplom¨¢ticos, que contar¨¢n con asesores del Ministerio de Defensa, depender¨¢n directamente del embajador especial, quien a su vez recibir¨¢ instrucciones de Madrid.Est¨¢ previsto que el pr¨®ximo d¨ªa 9 de marzo se inicien las reuniones de trabajo en ambos foros. La creaci¨®n de un grupo espa?ol estable para participar en las conversaciones fue aprobada por el Consejo de Ministros en su reuni¨®n del pasado d¨ªa 3 de febrero, pero los nombramientos correspondientes a¨²n no han sido decididos.

Las negociaciones sobre armas convencionales -conocidas por las siglas de CAFE (Conventional Armed Forces in Europe)- se celebrar¨¢n en Viena y en ellas participar¨¢n representantes de 23 pa¨ªses (los 16 miembros de la OTAN y siete del Pacto de Varsovia). Para los aliados occidentales, el objetivo de estas negociaciones consiste en reducir las asimetr¨ªas existentes en la actualidad -el Pacto de Varsovia dispone de una ventaja de dos a uno en carros de combate y artiller¨ªa pesada, seg¨²n la OTAN- y fijar un equilibrio de fuerzas al nivel m¨¢s bajo posible.

Desequilibrio

En la actualidad, existen discrepancias en las cifras de armas convencionales en ambos bloques difundidas por la OTAN y el Pacto de Varsovia, aunque los sovi¨¦ticos reconocen ya un claro desequilibrio en su favor, hecho que ya es considerado de forma positiva entre los aliados. Desde el punto de vista espa?ol, ser¨ªa un error que las negociaciones se atascaran durante mucho tiempo en esa discrepancia, ya que lo importante, seg¨²n las fuentes oficiales consultadas, es alcanzar un acuerdo sobre los niveles de fuerza que deber¨¢ habei en el futuro m¨¢s que sobre los existentes hoy, para despu¨¦s buscar adecuadas f¨®rmulas de verificaci¨®n.La OTAN ha propuesto ya reducir a la mitad los 80.000 carros de combate que hoy est¨¢n desplegados en el terreno europeo, de forma que cada bloque s¨®lo pueda disponer de 20.000 y que un solo pa¨ªs no pueda tener m¨¢s del 30% de la cantidad estipulada, de forma que no sea posible para ninguna de las dos partes realizar un ataque masivo por sorpresa.

En el caso de que esta tesis sea aceptada, es muy probable que Espa?a tenga que reducir algunas decenas, o incluso algunos centenares, de los 850 carros de combate que tiene ahora el Ej¨¦rcito de Tierra. Adem¨¢s, en ese foro tambi¨¦n se estudiar¨¢n l¨ªmites sobre las fuerzas extranjeras estacionadas en pa¨ªses europeos, extremo que tambi¨¦n podr¨ªa afectar al uso de bases espa?olas por porte de EE UU.

En el segundo foro, relativo a la adopci¨®n de medidas de seguridad y confianza entre ambos bloques, participar¨¢n representantes de los 35 pa¨ªses de la CSCE.