Maragall y Yoko Ono inauguran con un breve acto la exposici¨®n en memoria de John Lennon

La exposici¨®n Imagine: John Lennon fue inaugurada en la tarde de ayer en el local de Transformadors de Barcelona. Por la noche se celebr¨® el concierto homenaje a la memoria del m¨²sico, con la participaci¨®n de diferentes artistas espa?oles. La muestra sobre Lennon permanecer¨¢ abierta hasta el 9 de julio. En el acto oficial de inauguraci¨®n, muy breve y de escaso protocolo, participaron la viuda del cantante, Yoko Ono, y el alcalde de la ciudad, Pasqual Maragall, que encabez¨® una notable representaci¨®n de las ¨¢reas municipales de Cultura y Juventud. Al finalizar la poco emotiva inauguraci¨®n, a la que asistieron unas 300 personas, la viuda del Beatle y el alcalde se tomaron una horchata en un establecimiento cercano.

El alcalde Maragall fue m¨¢s puntual que la estrella del acto, Yoko Ono, que se person¨® unos 20 minutos despu¨¦s de la hora oficial del comienzo, a bordo de un Mercedes azul que la dej¨® frente al edificio que alberga la muestra. Sin huir del acoso fotogr¨¢fico y mostrando una meticulosa profesionalidad en el cumplimiento de su papel, Yoko, que vest¨ªa una camisa blanca y unos ajustados pantalones negros, entr¨® en Transformadors rodeada por su equipo y entre alg¨²n t¨ªmido grito de las pocas fans que aguardaban expectantes su llegada.Yoko agasaj¨® a la ciudad de Barcelona, se mostr¨® satisfecha por el recibimiento y, una vez m¨¢s, volvi¨® a agradecer la presencia, el apoyo y la comprensi¨®n de los all¨ª presentes. La viuda de, Lennon manifest¨® que estaba muy feliz de que la exposici¨®n se exhibiera "en una ciudad tan maravillosa como Barcelona". Por su parte, y en otro escueto parlamento, Maragall signific¨® que lo que estaba ocurriendo en aquel momento no habr¨ªa sido posible 10 a?os atr¨¢s, y continu¨®: "Hubiera estado bien que Lennon pudiese estar aqu¨ª, aunque, al menos, tenemos su esp¨ªritu".

Ambos abandonaron Transformadors a la media hora escasa. Ello no fue ¨®bice para que su charla con el alcalde se cerrase en una cafeter¨ªa pr¨®xima ante la presencia de dos horchatas y de un numeroso grupo de sorprendidos transe¨²ntes, algunos de los cuales se abalanzaron en pos de un aut¨®grafo de la famosa viuda.