200.000 argentinos, contra los indultos de Menem

La marcha contra el indulto que el presidente argentino, Carlos Menem, est¨¢ dispuesto a conceder, en una primera etapa, a los 17 generales y dos almirantes que a¨²n contin¨²an bajo proceso, acusados por su responsabilidad en la guerra sacia que la dictadura militar desat¨® contra la guerrilla de izquierdas entre 1976 y 1983, se convirti¨® el viernes por la noche (madrugada de ayer en Espa?a) en la mayor manifestaci¨®n en defensa de los derechos humanos desde el comienzo de la transici¨®n democr¨¢tica, en 1983. Unas 150.000 personas recorrieron el centro de Buenos Aires y m¨¢s de 50.000 se manifestaron en otras ciudades del pa¨ªs.

Los manifestantes de la capital argentina se concentraron despu¨¦s de la marcha en la Plaza del Congreso, donde la hija de un dirigente pol¨ªtico y sindical desaparecido ley¨® el texto de una carta enviada al presidente Menem. Otras decenas de miles de personas se manifestaron en las grandes ciudades del pa¨ªs, sin que se produjeran incidentes graves durante, la jornada nacional de protesta. El presidente Menem asegur¨® que nada har¨¢ cambiar su decisi¨®n, que probablemente sea adoptada a finales de este mes, porque "igual que a los 100.000 que marcharon, a m¨ª tampoco me gustan las medias tintas. Ellos y yo elegimos fr¨ªo o caliente, porque a los tibios los vomita Dios". Menem agreg¨® que si no adoptaba una decisi¨®n urgente dejar¨ªa "una herida abierta en el cuerpo de la Rep¨²blica".

"?Justicia!, grit¨® Laura Soto, de 18 a?os, hija del concejal peronista por el distrito de La Matanza y dirigente sindical Delfor Soto, secuestrado por un grupo paramilitar el 21 de agosto de 1976 y desaparecido desde entonces, al finalizar la lectura del documento. Cuando esto ocurr¨ªa, y en la Plaza del Congreso -de espaldas al edificio del Parlamento y de frente a la Casa Rosada, la sede del Gobierno- la multitud cantaba el himno nacional argentino, a 20 calles de all¨ª todav¨ªa hab¨ªa manifestantes esperando para ponerse en movimiento y continuar la marcha. Cerca de la medianoche, las columnas de todos los partidos de oposici¨®n, de la Juventud Radical y de la Juventud Peronista, adem¨¢s de las que representaban a sindicatos, organizaciones sociales, centros de estudiantes y partidos extraparlamentarios, cubr¨ªan totalmente la plaza y el recorrido previsto por los organizadores.

"Por la vida y la justicia"

La polic¨ªa no interrumpi¨® el tr¨¢nsito de autom¨®viles y al caer la tarde los manifestantes y los veh¨ªculos produjeron un atasco que colaps¨® todo el ceritro comercial de la ciudad. Dos horas despu¨¦s de la fijada para el comienzo de la marcha, la primera l¨ªnea de dirigentes de cada uno de los partidos y organizaciones convocantes se puso en movimiento detr¨¢s de una pancarta que llevaba escrita la consigna central: "Por la vida y la justicia, no al indulto". Los principales l¨ªderes de la Juventud Radical, entre ellos el ex ministro del Interior Enrique Nosiglia, y los diputados de la corriente renovadora del peronismo, encabezaron las columnas que integraban los militantes de esos partidos.

Los j¨®venes radicales soportaron los gritos hostiles de quienes recordaban a su paso las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida que el Parlamento aprob¨® por iniciativa del Gobierno que presid¨ªa el radical Ra¨²l Alfons¨ªn. El ex presidente no hizo declaraciones p¨²blicas.

La televisi¨®n dej¨® de informar sobre la manifestaci¨®n despu¨¦s de las nueve de la noche. Los peri¨®dicos de mayor venta y difusi¨®n del pa¨ªs, el populista Clar¨ªn y el derechista La Naci¨®n no le dedicaron el principal t¨ªtulo de su primera plana. Por su parte, los dos peri¨®dicos de izquierda, P¨¢gina 12 y Sur, cubrieron todos los detalles en las p¨¢ginas, de apertura. La organizaci¨®n Madres de Plaza de Mayo fue el ¨²nico grupo defensor de los derechos humanos que decidi¨®, por su cuenta, hacer una "contramarcha". En sentido inverso al de la mayor¨ªa, recorrieron la Avenida de Mayo, y se ubicaron junto al tradicional obelisco de Buenos Aires. La presidenta de las Madres, Hebe de Bonafini, dijo: "Estamos en rebeld¨ªa por el documento que se va a leer. Eso ya se ha dicho, ahora hay que decir los nombres de los responsables".

El texto, le¨ªdo en la Plaza del Congreso, es el de una carta enviada al presidente en el que se la recuerda que "las heridas no han cicatrizado porque no hubo reconocimiento de los cr¨ªmenes. Los militares, adem¨¢s de presionar para obtener el olvido, quieren que la represi¨®n ilegal se considere como una gesta". Laura Soto agreg¨®: "Se?or presidente, como joven de este pa¨ªs quiero decirle que no deseo indulto ni amnist¨ªa, pero tampoco la venganza; s¨®lo quiero justicia, justicia, justicia".