Los cristianos libaneses aceptan el plan de paz ¨¢rabe
Los contactos con el ministro saud¨ª de Exteriores, el pr¨ªncipe Faisal al Saud, ayudaron ayer a los diputados del bloque cristiano liban¨¦s a dar su acuerdo al documento de reconciliaci¨®n nacional elaborado por el triunvirato mediador de la Liga ?rabe (Arabia Saud¨ª, Argelia y Marruecos), cuando ya se perd¨ªa la esperanza de concluir con ¨¦xito la reuni¨®n de Taif. Un total de 59 de los 62 parlamentarios asistentes aprobaron anoche, a mano alzada, el texto final de compromiso. Sin embargo, el dirigente maronita general Michel Aoun rechaz¨® de inmediato el acuerdo. "Si el pueblo me sigue le har¨¦ frente, si sigue a los diputados, me retiro" afirm¨®.
Tras 23 d¨ªas de debates y propuestas y contrapropuestas sobre L¨ªbano, la reuni¨®n de Taif volvi¨® al punto de partida: La presencia siria en L¨ªbano. Con los diputados musulmanes, a favor, y los cristianos, en contra, el problema se presentaba desde el principio irresoluble. El pr¨ªncipe Faisal ha sido tajante al dirigirse al bloque cristiano a su regreso de Damasco: "O lo toman o lo dejan"."Rechazar el acuerdo significar¨ªa el regreso a la guerra y no podemos asumir esa responsabilidad", manifest¨® un diputado cristiano poco convencido, no obstante, de las garant¨ªas ofrecidas por el triunvirato mediador.
En el documento de reconciliaci¨®n preparado por la Liga ?rabe, los cristianos libaneses han conseguido la promesa de una declaraci¨®n anexa con el compromiso de la retirada siria de su pa¨ªs. Ha sido rechazada, sin embargo, su petici¨®n de un calendario preciso para la salida de esos soldados, unos 35.000.
El riesgo radica ahora, ante el desconocimiento del contenido del compromiso, en que ¨¦ste sea tan gen¨¦rico que no arregle nada. De otra forma, parece improbable que pueda satisfacer a todas las partes y no hay que descartar que, a¨²n con el respaldo de todos los parlamentarios libaneses, resulte dificil su puesta en pr¨¢ctica. Un vicio formal fomenta esta sospecha. Los 62 diputados presentes en Taif fueron elegidos en 1972, tres a?os antes de que se iniciara la guerra civil, y en absoluto representan a las fuerzas reales del pa¨ªs, las todopoderosas milicias. ?stas podr¨ªan impedir la reuni¨®n del Parlamento en su sede beirut¨ª de Villa Mansur, condici¨®n indispensable para que los acuerdos de Taif adquieran valor constitucional. Por un lado, Aoun, que en septiembre de 1988 asumi¨® de forma interina la presidencia del Gobierno con el desacuerdo de los aliados de Damasco, ha calificado el documento de "capitulaci¨®n" ante Siria. Por el otro musulmanes shi¨ªes y drusos se mantienen a distancia de un texto, que sigue reservando a la comunidad cristiana maron¨ª el privilegio de la presidencia de la Rep¨²blica.
Aoun advierte que el acuerdo "no es conveniente en lo que respecta a la soberan¨ªa nacional" de L¨ªbano. Los sectores musulmanes m¨¢s radicales, los shi¨ªes proiran¨ªes, llegaron incluso a amenazar de muerte a los diputados libaneses asistentes a Taif.
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