Las bolsas van a introducir la negociaci¨®n de deuda del Estado en la contrataci¨®n por ordenador
La colocaci¨®n de deuda p¨²blica entre los peque?os inversores se enfrenta actualmente al cobro de elevadas comisiones por parte de las entidades de cr¨¦dito, tanto por la compra inicial como por cualquier negociaci¨®n posterior en mercado secundario. Para evitarlo, la Direcci¨®n General de? Tesoro ha decidido actuar en tres frentes, que intentar¨¢n aumentar la transparencia en precio y rentabilidad que Haga a los ahorradores. A la posibididad de abrir cuentas directas en cualquiera de las sucursales del Banco de Espa?a se unir¨¢ este a?o el paso de la contrataci¨®n burs¨¢til de la deuda p¨²blica desde los corros hasta la contrataci¨®n por ordenador y la posibilidad de que las sociedades de valores se conviertan en entidades gestoras de deuda p¨²blica.
La potenciaci¨®n del mercado burs¨¢til de deuda p¨²blica es uno de los principales objetivos de la pol¨ªtica de deuda p¨²blica que Econom¨ªa ha trazado para este a?o. Las negociaci¨®n burs¨¢til de la deuda p¨²blica se realiza todav¨ªa en los corros de renta fija, pero la puesta en marcha del mercado telef¨®nico y la negociaci¨®n de la deuda p¨²blica por el sistema de anotaciones en cuenta para el mercado mayorista ha dejado el volumen intermediado en las bolsas bajo m¨ªnimos. El inconveniente de esta situaci¨®n es que las bolsas no garantizan la suficiente liquidez de estos t¨ªtulos y que adem¨¢s la volatilidad de los precios impide que puedan servir como referencia siquiera para el tramo minorista de este mercado.Para solucionar esta falta de liquidez y transparencia, las bolsas de valores est¨¢n estudiando el m¨¦todo para introducir la deuda p¨²blica en la contrataci¨®n general por ordenador, a ser posible a lo largo de este a?o. Con ese nuevo sistema de contrataci¨®n, las cotizaciones de la deuda en las cuatro bolsas ser¨ªan id¨¦nticas. Esa cotizaci¨®n ¨²nica intenta dar transparencia al mercado secundario de deuda dentro del tramo minorista. En concreto, el objetivo perseguido con esta medida es que la cotizaci¨®n burs¨¢til de la deuda sea el punto de referencia para los bancos y cajas que intermedian t¨ªtulos p¨²blicos para peque?os inversores.
Una de las dificultades que encuentra el mercado de deuda en bolsa, seg¨²n fuentes del Tesoro, es que se trata de un mercado de naturaleza casi bancaria m¨¢s que de un mercado de valores. Por este motivo, aseguran las mismas fuentes, se han extendido tanto las cesiones temporales de deuda (los repos). El elevado nivel del coeficiente de caja es uno de los motivos que anima a las entidades de cr¨¦dito a realizar estas operaciones de cesi¨®n temporal de deuda p¨²blica, ya que estas operaciones siguen siendo una forma de captar fondos a corto plazo sin que ¨¦stos computen en el cumplimiento del coeficiente de caja, adem¨¢s de ser un m¨¦todo rentable de descargar la cartera de t¨ªtulos p¨²blicos que mantienen los bancos, en parte obligados por el coeficiente de inversi¨®n.
El objetivo del Tesoro de convertir las cotizaciones burs¨¢tiles de la deuda en la referencia de precio para el mercado minorista prev¨¦ tambi¨¦n la posibilidad de que algunas sociedades de valores pasen a ser entidades gestoras de deuda p¨²blica. Los requisitos que deber¨¢n cumplir las sociedades de valores para convertirse en gestoras est¨¢n siendo estudiados en estos momentos por el Banco de Espa?a y la Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Esta incorporaci¨®n se enfrenta al problema de que el n¨²mero m¨¢ximo de gestoras de deuda est¨¢ limitado por razones t¨¦cnicas. La soluci¨®n que ya ha empezado a adoptarse para "hacer sitio" a las sociedades de valores consiste en cancelar la condici¨®n de sociedad gestora a los bancos o cajas que no alcancen una media m¨ªnima de negociaci¨®n; esta cancelaci¨®n acaba de aplicarse a tres bancos.
Cuentas directas
La negociaci¨®n burs¨¢til por ordenador y la inclusi¨®n de las sociedades de valores en el club de las gestoras de deuda son las dos medidas que van a ponerse en pr¨¢ctica para dotar de transparencia y liquidez a las operaciones de compraventa de deuda por parte de peque?os inversores en el mercado secundario. Como paso previo -y teniendo en cuenta que buena parte de estos ahorradores suelen preferir comprar cualquier t¨ªtulo de renta fija hasta su vencimiento-, la compra de t¨ªtulos p¨²blicos en el momento de su emisi¨®n por el Tesoro no soportar¨¢ ninguna comisi¨®n si el ahorrador decide abrir una cuenta directa en cualquiera de las oficinas provinciales del Banco de Espa?a. Esta posibilidad ser¨¢ efectiva desde el 1 de febrero.
El problema de estas cuentas directas es que no incluyen la negociaci¨®n posterior de esa deuda en mercado secundario, en contra de lo que ocurre con las cuentas financieras, con lo que si el inversor quiere vender antes del momento de amortizaci¨®n de los t¨ªtulos tendr¨¢ que traspasar esa deuda a una entidad gestora (banco, caja o, en el futuro, sociedad de valores). Las cuentas directas en el Banco de Espa?a s¨®lo pretenden, seg¨²n fuentes de la Administraci¨®n, incentivar a bancos y cajas para que colaboren en la colocaci¨®n de t¨ªtulos p¨²blicos por la v¨ªa de reducir las comisiones que cobran actualmente -calificados de "costes disuasorios" por el Tesoro-, y que alejan ostensiblemente la rentabilidad fijada en la subasta de la que finalmente paga el banco.
Este objetivo de reducir las comisiones del tramo minorista al m¨¢ximo se ver¨¢ reforzado por una serie de medidas que facilitar¨¢n al inversor el traspaso de sus t¨ªtulos de una entidad gestora a otra que le ofrezca un precio de venta m¨¢s competitivo. La reducci¨®n de costes de esos futuros traspasos tambi¨¦n ser¨¢ aplicable a la deuda p¨²blica comprada directamente en el Banco de Espa?a, bajo el nuevo sistema de las cuentas directas.
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