La muerte en directo
Se habla mucho de Irak y Sadam Husein aludiendo a su conducta con distintos y pintorescos calificativos, tal vez para evitar el t¨¦rmino "imperialismo", su verdadero nombre, que trae cargo de conciencia a la mayor¨ªa de las naciones que se autoproclaman civilizadas. Pasando esto por alto las naciones civilizadas nos tapan los ojos y los o¨ªdos con arengas que aluden a la defensa de los pobres kuwait¨ªes y ¨¢rabes en general, y con palabras como "dictador", "nuevo Hitler" y "carnicero"; un carnicero, adem¨¢s, peligroso, puesto que usa las mismas armas qu¨ªmicas que us¨® EE UU en Vietnam y que le vendieron sus amigas desarrolladas pensando seguramente que las iba a usar de abono para sus poco f¨¦rtiles desiertos.Intentan as¨ª distraernos del verdadero motivo que mueve a estas naciones al bloqueo econ¨®mico y a la posible intervenci¨®n militar: el econ¨®mico. El mismo motivo que las impuls¨® a explotar a los pa¨ªses ¨¢rabes mientras fueron sus colonias y a venderles a la ligera excedente armament¨ªstico despu¨¦s, y que llev¨® a estas naciones a invadir impunemente Panam¨¢ o Afganist¨¢n, pero ¨¦stos eran casos distintos.
Con estos justificantes los pa¨ªses desarrollados mandan tropas al Golfo y los espa?oles nos damos cuenta de que vamos a estar representados all¨ª a pesar de las rotundas declaraciones de Felipe Gonz¨¢lez en Viena a favor del principio de no intervenci¨®n (EL PAIS, n¨²mero 4.859). Tal vez nos estemos dando cuenta ahora de las servidumbres en un tema tan delicado como el militar que impone la pertenencia a la OTAN y a la UEO.-
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