Las emisarias de la naci¨®n
Janet Paterson Frame Clutha naci¨® el 28 de agosto de 1924 en Dunedin, Nueva Zelanda. En la noche del 9 de enero de 1923 mor¨ªa en Fontainebleu la neozelandesa, compatriota tambi¨¦n en la peque?a naci¨®n de las letras, Katherine Mansfield. La secuencia temporal entre la muerte de una y el nacimiento de la otra marca en los hechos una fractura que con los a?os se pronunciar¨¢ en las divergencias de los estilos literarios.Es llamativo que Nueva Zelanda sea conocida en el mundo m¨¢s que nada por sus mujeres, las escritoras Katherine Mansfield y Janet Frame, la precursora de los vuelos globales en la aviaci¨®n civil Jean Batten -muerta en el anonimato en Mallorca en 1982-, la soprano maor¨ª neozelandesa Kiri Te Kanawa y ahora la directora de cine Jane Campion.
Frame es una poetisa vigorosa, profundamente distanciada de la corriente imaginista que marc¨® ferozmente la est¨¦tica sajona en poes¨ªa desde Pound en adelante, apalancada por Thomas Stearns Eliot. El verbo de Frame est¨¢ m¨¢s pr¨®ximo a la generaci¨®n golpeada directamente por la guerra" de la que son exponentes Robert Graves y Sigfried Sassoon, guardando las distancias temporales que les separan. Una personalidad profundamente torturada que ha escapado a la median¨ªa neozelandesa, caracterizada entre otras cosas por un igualitarismo que .se ha traducido en el rasero que excluye la posibilidad de una individualidad discrepante. Frame sufri¨® esta peculiaridad de la sociedad en la que vive, y es probable que esa presi¨®n haya determinado en parte la fuga desesperada de Mansfield hacia Europa. Lo cierto es que en Nueva Zelanda Katherine Mansfield tuvo por mejor amiga no a una descendiente de europeos, sino a la maor¨ª Maata Mahupuku.
"...Es sabio / no olvidar jam¨¢s la permanente impermanencia del / sepulcro, / su suelo de arcilla, ¨¦l n¨²cleo fundido de la tierra, su tejado / sin tejas, la lluvia y los rayos del sol flech¨¢ndose / por las rendijas de puertas y ventanas...", dice Frame en sus reflexiones po¨¦ticas sobre la muerte, tema que ronda su obra, iniciada en 1951 con su colecci¨®n de relatos -que es como en una ¨¦poca empezaban los escritores- La laguna. Este libro fue el sello con el que Frame cerr¨® ocho a?os de confinamiento en un hospital psiqui¨¢trico. Pod¨ªa ser distinta y sostener precisamente esa diferencia en la palabra, simplemente siendo fiel a ella, algo pasado de moda.
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