Operaci¨®n 'Alto Tigris'

CHARO NOGUEIRA ENVIADA ESPECIAL, Con el establecimiento de tres controles en las carreteras de acceso a la ciudad de Zajo -a12 kil¨®metros de la frontera con Turqu¨ªa-, los paracaidistas espa?oles iniciaron ayer su actividad en Irak. Los 350 militares del Ej¨¦rcito de Tierra est¨¢n ya en la fase Alto Tigris, ¨²ltima de la operaci¨®n Alfa Kilo que les ha tra¨ªdo a Irak en misi¨®n humanitaria de ayuda al pueblo kurdo.

R¨¢pidamente, instalar¨¢n tambl¨¦n un hospital de campa?a dotado con UVI y quir¨®fanos, a 70 kil¨®metros al Este de la ciudad de Zajo, en la zona de Al-Amadia. Este lugar est¨¢ situado 40 kil¨®metros por detr¨¢s de la vanguardia aliada, que ha avanzado en los ¨²ltimos d¨ªas m¨¢s al Este de este punto. Tambi¨¦n-pondr¨¢n en inarcha una pequena consulta pedi¨¢trica en la base.Los controles quedaron establecidos a la una de la tarde (hora peninsular). Los paracaidistas vigilan en las tres carreteras de acceso a Zajo, ciudad que alberga el cuartel general aliado y un campo de refugiados. El punto Sierra, al Sur, vigila la carretera hacia Bagdad, la capital que dista 500 kil¨®metros. El control Eco, la v¨ªa hacia el Este, y el Whisky, la entrada por el Oeste: accesos desde Turqu¨ªa y Siria.

La misi¨®n fundamental de cada destacamento, integrado por 30 hombres al mando de un temente, es impedir que los transe¨²ntes entren con armas. Los paracaidistas vigilan con armainento ligero. "Zajo es ya una zona asegurada y hay que dar garant¨ªa absoluta de que no haya incidentes armados", explic¨® el jefe de la agrupaci¨®n, coronel Ledesma.

Controles sencillos

Los paracaidistas espa?oles, que a¨²n no disponen de todo su material debido al retraso en la salida del barco que lo transporta junto con la ayuda humanitaria -el buque a¨²n estaba ayer en puerto espa?ol-, han instalado controles sencillos, con conos naranjas, cinta pl¨¢stica, bloques de ladrillo, sacos terreros y poco m¨¢s. Al menos por el momento.

La ayuda directa a los kurdos refugiados en las monta?as tendr¨¢ que esperar. En el control Whisky los espa?oles relevaron a los marines norteamericanos, dotados de veh¨ªculos artillados y heredaron parte de su mater' al: sacos terreros y el cartel que anuncia el control de las fuerzas de la coalici¨®n. "Los espa?oles van a tener mucho trabajo, porque aqu¨ª el tr¨¢fico es intenso", augur¨® uno de los marines.

Nayi, un paraca nacido al otro lado del Estrecho de Gibraltar, prest¨® su primer servicio al dirigirse en ¨¢rabe a un iraqu¨ª cuyo veh¨ªculo pinch¨® una rueda en medio del control. Militares espa?oles contemplaron tambi¨¦n a 40 soldados iraqu¨ªes que se entregaron a los norteamericanos en la frontera de Siria.

Los paracaidistas han recibido instrucciones de ser "amables y simp¨¢ticos" con los transe¨²ntes, a los que se dirigen en espa?ol en caso de preguntar si llevan armas. El mando tiene ¨®rdenes de no izar la bandera espa?ola.

Aunque el coronel espa?ol s¨®lo mencion¨® las misiones citadas, el capit¨¢n Moore, del servicio norteamericano de relaciones p¨²blicas, hab¨ªa asegurado que los paracaidistas se encargar¨ªan, entre otras cosas, de la seguridad en el hospital de Zajo.

Los paracas no realizar¨¢n patrullas por la ciudad, asegur¨® el coronel Ledesma. A?adi¨® que, para evitar el riesgo que suponen las abundantes minas, sus hombres se mover¨¢n sobre itinerarios principales y protegidos.