Impresionante victoria de Arantxa sobre Graf

Arantxa S¨¢nchez Vicario (5? cabeza de serie) logr¨® ayer una impresionante victoria ante Steffi Graf (Alemania, 2?) por 6-0 y 6-2 en 54 minutos, y se clasific¨® para jugar ma?ana la final de Roland Garros -que ya gan¨® en 1989- contra M¨®nica Seles (Yugoslavia, 1?). Seles derrot¨® por 6-4 y 6-1 a Gabriela Sabatini (Argentina, 3?) y defender¨¢ el s¨¢bado el t¨ªtulo que gan¨® en 1990. Arantxa jug¨® el partido m¨¢s perfecto de su vida y descentr¨® completamente a Steffi Graf, que en ning¨²n momento pudo sacar sus golpes. Steffi no perd¨ªa un set por 6-0 desde 1984.

"Arantxa est¨¢ como una bomba, hipermotivada", explic¨® una persona que estuvo junto a la espa?ola mientras esperaba en el vestuario el inicio de un partido muy retrasado por la lluvia. Arantxa cuid¨® todos los detalles e incluso se puso, por primera vez en este torneo, la mu?equera con los colores de Espa?a que le regal¨® su hermano Emilio antes de la final de 1989 y que tan buena suerte le dio.Y ,efectivamente, Arantxa sa li¨® como una bomba. Una bomba at¨®mica. Gan¨® la primera manga por 6-0 en 20 minutos. Desde 1984 Steffi no encajaba un 6-0 y, desde 1983 en un torneo del Grand Slam cuando, con 13 a?os, y a punto de cumplir 14, perdi¨® en la segunda ronda de su primier Roland Garros ante Beverly, Mould (Sur¨¢frica) por 6-0 y 7-6. Se esperaba que Graf se vengase de la final de 1989, pero en realidad fue Arantxa la que lo hizo y se tom¨® revancha de los tres roscos que le hab¨ªa endosado en partidos anteriores.

Arantxa lo hizo todo perfecto y Steffi, mentalmente fuera del partido, lo hizo todo mal. Graf tard¨® 24 minutos en ganar un juego, el primero del segundo set, pero fue incapaz de romper la t¨¢ctica de la espa?ola, quiz¨¢s una de las jugadoras m¨¢s inteligentes del circuito.

Cambio de juego

Arantxa cambi¨® continuamente el juego cuando Steffi estaba convencida de que, como siempre, le castigar¨ªa ¨²nicamente el rev¨¦s. Adem¨¢s, la alemana anduvo lenta y se vio obligada a arriesgar al m¨¢ximo, cometiendo 37 fallos directos.

La peque?a de los S¨¢nchez Vicario tambi¨¦n demostr¨® sus enormes progresos desde 1989. No perdi¨® ni una sola vez el saque y rompi¨® el de la alemana en cinco ocasiones. No fall¨® pr¨¢cticamente ni una bola y sac¨® sus nuevos recursos (volea, derecha ganadora y rev¨¦s paralelo) con cuentagotas, pero siempre que fue necesario.

A Steffi le salv¨® del ko r¨¢pido la lluvia, que apareci¨® a las 37 minutos de partido, cuando la espa?ola ya dominaba por 2-1 en el marcador tras romper el servicio de Graf. Ambas jugadoras se retiraron al vestuario a reflexionar, en un descanso que, evidentemente, le era m¨¢s necesario a Steffi Graf

Pero la fuerza de Arantxa est¨¢ m¨¢s en su cabeza que en sus golpes. Volvi¨® a la pista, 46 minutos despu¨¦s, muy concentrada y tan agresiva como antes. Gan¨® siete puntos consecutivos y volvi¨® a escaparse. El momento clave de la reanudaci¨®n estuvo en el sexto juego, cuando Graf se coloc¨® con 0-40 y tres oportunidades de romper el servicio de la espa?ola. Si lo hubiese roto, habr¨ªa tenido una oportunidad de 4-2. Pero Arantxa no suele soltar su presa cuando la tiene bien amarrada. Ayer no le import¨® ni la lluvia, ni la n¨²mero dos del mundo, ni el 10-1 con el que Graf dominaba en sus enfrentamientos anteriores. Gan¨® ese juego, se coloc¨® con 5-1 y remat¨® el trabajo en su primer pelota de partido cuando volvi¨® a tener el saque en su poder.

Fue un encuentro tan f¨¢cil para Arantxa, mucho mejor jugadora que en 1989, que en lo ¨²nico que,se pareci¨® a aquella final fue en el tremendo salto de alegr¨ªa de la espa?ola cuando gan¨® el ¨²ltimo punto. No tuvo la magia de entonces, quiz¨¢s porque todos sab¨ªamos que una victoria de Arantxa no era ya un milagro. La espa?ola ni siquiera sonri¨® durante el partido, como hizo en 1989. Totalmente concentrada en su trabajo, su ¨²nico momento de alegr¨ªa lleg¨® al final. Lanz¨® la raqueta al aire, la recogi¨® antes de caer al suelo y empez¨® un recital de sonrisas y gestos hacia el palco, donde estaban sus padres. El s¨¢bado, ante Seles, tiene la oportunidad de reeditar su triunfo de 1989. De momento, ya ha demostrado a todos, y a s¨ª misma, que aquello no fue una casualidad.