La revoluci¨®n de Coppino
?Qui¨¦n es este Franco Chioccioli que, a sus casi 32 a?os, sue?a con ganar el Giro? Nacido en Castelfranco di Sopra el 25 de agosto de 1959, es un toscano introvertido, silencioso, un antipersonaje por excelencia. En nueve a?os de profesional, el l¨ªder del Giro se ha caracterizado por cambiar hasta siete veces de equipo: Selle Italia, Vivi Benotto, Murella, Fanini, Ecoflam, Gis y Del Tongo, en el que milita desde 1988.En el ambiente italiano, Chioccioli tiene un apodo curioso: todos le llaman Coppino por una lejana semejanza con el campeonissimo Fausto Coppi. De Coppi tiene Chioccioli la expresi¨®n triste, la discreci¨®n en los modos y la gracilidad de su f¨ªsico. Chioccioli detesta estar en la boca de la gente, prodigarse en las entrevistas, el mundo ruidoso de la fama.
Chioccioli fue maglia rosa dos d¨ªas en el Giro de 1988, aqu¨¦l que quedar¨¢ en el recuerdo de los aficionados por la dur¨ªsima ascensi¨®n al Gavia. Su palmar¨¦s profesional es m¨¢s bien modesto: ha vencido en 17 etapas de distintas carreras, ha lucido la maglia blanca -al mejor joven- en el Giro de 1983, ha ganado un Giro del Friuli, un Giro del Trentino y otras pruebas menores. El vencedor en Aprica comenz¨® la prueba sometido a una pugna entre dos equipos que amenazaba con llevarle a su octavo cambio de empresa. Chioccioli reclamaba la renovaci¨®n con el Del Tongo, pero dispon¨ªa de una oferta del espa?ol Seur, que le aseguraba un contrato por tres a?os y una cantidad total de 100 millones de pesetas. La oferta era oficial y Chioccioli busc¨® alguna confirmaci¨®n de su patr¨®n, Stefano del Tongo, a la vista de que exist¨ªan rumores sobre sus intenciones de abandonar el patrocinio de la squadra. Del Tongo, a la vista de la actuaci¨®n de Chioccioli, hizo una declaraci¨®n p¨²blica: "Si Chioccioli gana el Giro, seguir¨¦ en el ciclismo". La soluci¨®n no llegar¨¢ hasta el domingo, cuando la prueba concluya en Mil¨¢n.
Chioccioli parec¨ªa estar lejos del punto de mira de los especialistas a la hora de buscar los favoritos. Se est¨¢, por tanto, ante una sorpresa, pero relativa por cuanto su principal adversario, el espa?ol Marino Lejarreta, persigue su primer Giro a los 34 a?os. Francesco Conconi, el cient¨ªfico responsable de la reconstrucci¨®n de Francesco Moser hasta llevarle al r¨¦cord de la hora y a su primer Giro (1984) a una edad ya madura, no encuentra ninguna sorpresa, sin embargo, en esta presunta contradicci¨®n: "El ciclismo est¨¢ cambiando y ahora asistimos a un retorno a los grandes viejos. El f¨ªsico de un corredor es mucho m¨¢s completo cuando se superan los 30 a?os".
Chioccioli y Lejarreta pertenecen a una generaci¨®n que parec¨ªa relegada a un papel secundario, una generaci¨®n que dio el testigo a la formada por Lemond, Fignon, Delgado y Roche, una generaci¨®n que vio nacer a Bugno, Indur¨¢in, Breukink y Alcal¨¢.
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