Tir¨®n de orejas

Lo de las orejas, en la fiesta de los toros, suele identificarse con los trofeos concedidos a los diestros despu¨¦s de una buena faena, pero en este caso no es as¨ª, porque los ap¨¦ndices auriculares no son de novillo, sino de novillero. Se trata de un tir¨®n de orejas como cari?osa advertencia al joven y espigado Jos¨¦ Antonio Mu?oz, hoy en d¨ªa el novillero que mejor hace el toreo, para ver si aprende de una vez a matar, porque, de lo contrario, el indudable proyecto de gran figura del toreo que hay en ¨¦l, va a quedar truncado. Hab¨ªa gran expectaci¨®n por verle ayer en la Monumental, despu¨¦s de la gran tarde de toros que dio el pasado d¨ªa 16, y a pesar de no ser domingo y de la nula publicidad dada al festejo, hubo m¨¢s gente de la que se esperaba.Los resultados quiz¨¢ no fuesen tan brillantes como en la anterior ocasi¨®n, pero Mu?oz volvi¨® a dejar su tarjeta de visita. Su primero embest¨ªa rebrincado y con aspereza, con un pit¨®n izquierdo imposible, y ¨¦l estuvo aseado y tranquilo, sobre todo con la derecha, en los principios de una faena que no pudo cuajar. El quinto fue el ¨²nico que se emple¨® en varas, y en la muleta se arrancaba de lejos con alegr¨ªa, pero no consumaba el viaje, y, adem¨¢s, acab¨® mascando. Mu?oz lo bord¨® con el capote y luego la faena fue de lucimiento intermitente, con fases deslumbrantes que le hubiesen proporcionado un trofeo de no ser por el vergonzoso bajonazo que propin¨® para rematar su labor.

Los dos debutantes son toreros de muy distinto signo. El aragon¨¦s Carlos Casanova es valent¨ªsimo e intenta efectuar un toreo variado, haciendo uso de una cierta habilidad para conectar con el p¨²blico cuando no es posible el toreo de calidad. Aguant¨® sin pesta?ear ga?afones y derrotes en su dif¨ªcil primero. Al cuarto, manso, que se dejaba en la muleta pero que acab¨® par¨¢ndose, lo recibi¨® de rodillas en la puerta de toriles, en la misma posici¨®n en que comenz¨® el trasteo muleteril, en el que tore¨® bien con la derecha, pero abus¨® un poco de agarrarse a los costillares. Entr¨® a matar sin muleta y dio un pinchazo. Luego estuvo premioso con el descabello y perdi¨® el trofeo orejil.

Alberto Ram¨ªrez tiene buenas maneras, pero parece que le cuesta calentarse. Su primero muy quedado, no le dio demasiada opci¨®n, porque no transmit¨ªa emoci¨®n. En el sexto dio dos buenas series al natural, a pesar de la soser¨ªa y mansedumbre del novillo.