Una de reptiles
Pod¨ªa haber heredado un cortijo, unos grandes almacenes, una piedra preciosa o un importante paquete de acciones de bancos fusionados, pero Jes¨²s Serrano tuvo la fortuna o la desdicha de que su familia le cediera en testamento un acuario. El acuario madrile?o, que funciona desde 1958 y resulta fascinante a pesar de ese aspecto algo descolocado que, con un toque surrealista y otro rom¨¢ntico, consigue despertar el inter¨¦s de muchos madrile?os por una est¨¦tica m¨¢s que particular. En el primer piso, Jes¨²s ejerce de tendero. Desde un hormiguero hasta todos los tesoros que caben en un acuario dom¨¦stico. Organiza exposiciones de miniaturas donde una lupa hace visible un encuentro Madrid-Atl¨¦tico pintado en un grano de arroz o la Santa Faz en una chincheta. En los dos pisos de abajo est¨¢ la selva. El acuario de Madrid posee la primera boa de Madagascar que ha reptado tierra hispana. Inquietas se mueven las voraces pira?as del Amazonas.All¨ª vive el cocodrilo enano, no m¨¢s de metro y medio, el monstruo Gila que lleg¨® a Madrid en 1975 y se convirti¨®, sin querer, en testigo de la transici¨®n. Desde Manaos, Brasil, viajaron los dos gremlins, traviesos y rabilargos. En la parte did¨¢ctica, un papel pegado al cristal cuenta que gremlin significa d¨ªablillo, y que Spielberg intent¨® trabajar con los animalitos vivos, pero desisti¨® ante las travesuras de unos actores menos disciplinados que Marilyn Monroe. Por ah¨ª andan las iguanas, un reptil ambivalente que en ciertos lugares es visto como la reencarnaci¨®n del mismo diablo, y a los mexicanos, por ejemplo, les da la mujer suerte. Las m¨¢s peque?as nunca bajan el cuello, en el t¨ªpico adem¨¢n algo chuleta de quienes quieren parecer m¨¢s altos. La grandota evoluciona junto a su comida, una bandeja llena de algo parecido a tropezones de gazpacho. Por su parte, las tres peludas tar¨¢ntulas cr¨ªan a la vez y permanecen inm¨®viles en la esquina derecha de sus terrarios.
Para Jes¨²s Serrano, la tarea de entregar viva una presa a sus serpientes es un ritual que ya carece de inter¨¦s. Confiesa que alguna vez ha sido Tarz¨¢n a la fuerza, "porque se te escapa alg¨²n animal mientras est¨¢s con otro". Recuerda que hubo en tiempos una tierna pareja de lemures, monos de Madagascar, para entendernos. Uno de ellos muri¨® aquejado de una extra?a enfermedad, y al poco el otro muri¨® de pena. Adem¨¢s del fondo fijo de reptiles y otros animales, el acuario tiene este verano una exposici¨®n de cocodrilos.
Acuarium. Maestro Victoria, 8. De 12.00 a 16.00 y de 17.00 a 20.30.
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