La birmana Suu Kyi, Nobel de la Paz por ser "un s¨ªmbolo contra la opresi¨®n"

Aung San Suu Kyi, l¨ªder de la oposici¨®n a la Junta Nacional de la Uni¨®n de Myanmar (antigua Birmania), en el sureste asi¨¢tico, fue galardonada ayer con el Premio Nobel de la Paz de 1991 "por su contribuci¨®n no violenta a la defensa de la democracia y los derechos humanos". La disidente permanece bajo arresto domiciliario desde hace dos a?os por orden de una junta militar que ha ahogado en sangre toda discrepancia pol¨ªtica. "Ella se ha convertido en un importante s¨ªmbolo en la lucha contra la opresi¨®n", declar¨® Francis Sejersted, presidente del Comit¨¦ Nobel en Oslo.

El premio, de una cuant¨ªa cercana al mill¨®n de d¨®lares, fue concedido a la activista, de 46 a?os, a propuesta del presidente checoslovaco, V¨¢clav H¨¢vel, con el objetivo de destacar "uno de los m¨¢s extraordinarios ejemplos de lucha civil en Asia en las ¨²ltimas d¨¦cadas". Como hizo notar Sejersted al leer el comunicado, con la adjudicaci¨®n del galard¨®n a Suu Kyi se ha querido testimoniar el apoyo a todos aqu¨¦llos que en cualquier parte del mundo luchan por medios pac¨ªficos en favor de la democracia, los derechos humanos y la reconciliaci¨®n ¨¦tnica. Aung San Suu Kyi, cuyas referencias a la filosof¨ªa de Gandhl y Martin Luther King son frecuentes, ha llamado siempre a la resistencia pac¨ªfica para combatir una dictadura militar en el poder desde 1962.Poco conocida

Aunque la galardonada hab¨ªa recibido una distinci¨®n del Parlamento Europeo por su contribuci¨®n a la causa de la libertad y su nombre es poco conocido en el exterior, con la excepci¨®n del Reino Unido. Goza sin embargo de una gran popularidad en su pa¨ªs, no s¨®lo por ser la hija del considerado padre de la patria,Aung San, que dirigi¨® la resistenca contra el imperialismo brit¨¢nico hasta que fuera asesinado en 1947, sino tambi¨¦n por su compromiso en la lucha contra el r¨¦gimen militar de su pa¨ªs. Tras la matanza perpetrada por la Junta Militar, en junio de 1988, se cre¨® en Myanmar la Asociaci¨®n Democr¨¢tica Nacional, que ella pas¨® a liderar y que obtuvo el 80% de los votos en las elecciones de mayo de 1990, resultado no acatado por la Junta Militar. El nombre de Suu Kyi hab¨ªa sido mencionado en los d¨ªas previos como firme candidata a la obtenci¨®n del premio, junto con el del obispo espa?ol Pedro Casald¨¢liga, valedor de los campesinos e ind¨ªgenas del Matogrosso brasile?o. Entre quienes esperaban ayer la noticia en la sede del Instituto Nobel en Oslo se produjo cierta confusi¨®n cuando aparecieron en la sala dos miembros del Ej¨¦rcito de Salvaci¨®n, una de las organizaciones propuestas para el premio. La confusi¨®n qued¨® pronto aclarada cuando Sejersted anunci¨® el nombre de la ganadora.

El fallo fue recibida con satisfacci¨®n en medios pol¨ªticos noruegos. La primera ministra, Gro Harlem Brund¨²and, lo vincul¨® la lucha de Suu Kyi con la filosof¨ªa de no violencia practicada por Mahatma Gandhi en la India y dijo que el premio era una exhortaci¨®n al di¨¢logo. Peter Limbin, ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno de Myanmar en el exilio, se?al¨® que el premio es un est¨ªmulo para la oposici¨®n de su pa¨ªs. Otro promiente exiliado, Hla Pe, declar¨® que el premio es de un incalculable valor para poder acelerar el proceso hacia el establecimiento de la democracia en Myanmar. "No creo que la junta permita celebrar el galard¨®n, pero los birmanos se fortalecer¨¢n psicol¨®gicamente con la decisi¨®n del comit¨¦ noruego para el Nobel", dijo. El embajador birmano en Tailandia, Nyunt Swe, ha adelantado que el Nobel no contribuir¨ªa a mejorar las condiciones de la reclusi¨®n domiciliaria.