"Cambio de bandera' es una historia de traiciones y mentiras"

Cambio de bandera supone un cambio de registro evidente respecto a las anteriores novelas de F¨¦lix de Az¨²a. La acci¨®n se aleja de las mundanidades del presente y se sit¨²a en los a?os treinta. El escenario es el Pa¨ªs Vasco y el protagonista, un personaje de la burgues¨ªa que se debate entre una serie de traiciones mientras lucha por su obsesi¨®n: conseguir un avi¨®n con el que bombardear en solitario al enemigo. Con un estilo cuidado al m¨¢ximo, F¨¦lix de Az¨²a hace avanzar la novela -primero a ritmo lento, despu¨¦s acelerado- hasta un final en el que todos los elementos encajan a la perfecci¨®n.Pregunta Al escribir la novela, ?pretend¨ªa m¨¢s que nada escribir sobre los nacionalismos?

Respuesta Empec¨¦ Cambio de bandera hace unos cuatro a?os y entonces no hab¨ªa el menor espect¨¢culo nacionalista. La cuesti¨®n ¨¦sa me ha cogido sin querer. La novela nace de una historia real. La primera novia seria que tuve (me remonto casi al pleistoceno) era hija de un diplom¨¢tico republicano, nacionalista vasco, que se exili¨® al sur de Francia. El era de familia rica, de las de entonces, y su obsesi¨®n era utilizar su dinero para organizar un ataque personal contra Franco. Desde el, primer momento me pareci¨® que era una bonita historia desde el punto de vista literario. Unos 15 a?os m¨¢s tarde, conoc¨ª en Par¨ªs, a otra mujer muy interesante, cuyo padre era un diplom¨¢tico italiano que hab¨ªa intervenido en las negociaciones entre el PNV y los fascistas italianos para entregarle el Pa¨ªs Vasco. La idea de unir las dos historias era demasiado tentadora.

P. Respecto a su obra anterior, supone un cambio notable.

R. Despu¨¦s de terminar mi ¨²ltima novela, Diario de un hombre humillado, me disgustaba seguir en esa l¨ªnea nihilista o destructiva, pero no sab¨ªa si estaba suficientemente preparado para contar una historia m¨¢s sentimental, m¨¢s esperanzada, m¨¢s positiva. Y es que hay que ser muy maduro para contar historias que te reconcilien con el mundo.

P. En el fondo, es una historia de traiciones.

R. S¨ª. Es una historia de traiciones y mentiras, como posiblemente lo sea toda la historia pol¨ªtica. En los art¨ªculos que Mario Vargas Llosa publica en EL PA?S se transpira lo escaldado que ha salido de la pol¨ªtica. Y es que. los novelistas somos unos sinverg¨¹enzas que escribimos de cosas que no conocemos. Ahora, Vargas Llosa ser¨¢ el ¨²nico que podr¨¢ escribir una novela pol¨ªtica, pero yo imagino que pol¨ªtica y traici¨®n es lo mismo. Cambio de bandera trata de c¨®mo salvarse de la traici¨®n y de sus propias traiciones. El protagonista, posiblemente, era m¨¢s traidor que nadie, hasta que se da cuenta y puede reaccionar. Pero lo normal es que la mayor¨ªa se adapte a la traici¨®n.

P. El nacionalismo es en todo momento un tel¨®n de fondo en el que se reflejan las fidelidades de los personajes.

R. En Cambio de bandera el protagonista est¨¢ sujeto a dos fidelidades y no tiene m¨¢s remedio que traicionar a una de las dos. Es, en el fondo, el modelo t¨ªpico de la tragedia griega. La pregunta que se transforma a lo largo de la novela es: ?cu¨¢l es su patria? Al principio es una, pero al final ve que puede ser otra.

P. Alguien dice en la novela que la patria puede ser por ejemplo, un buen plato de rodaballo.

R. Es que normalmente es eso. Para las personas que tienen sentimientos nacionalistas, pero que son pocos te¨®ricos, el nacionalismo es un puro sentimiento est¨¦tico. Por eso es tan dif¨ªcil razonar con los nacionalistas.

P. El estilo es, sin duda, una de las mejores bazas del libro.

R. Escribir es aburrid¨ªsimo a pesar de lo que digan algunos escritores, que llegan a compraralo con un orgasmo. Para no aburrirme, me planteo en cada libro un peque?o problema, como de ajedrez. En este libro, todo el texto est¨¢ escrito a la manera de un testamento y el narrador permanece oculto hasta el momento final.

P. Es curioso constatar que comparte el inter¨¦s del PNV con otra novela reciente, Gal¨ªndez, de V¨¢zquez Montalb¨¢n.

R. Manolo y yo nos conocemos hace mucho tiempo, pero nunca hablamos de literatura. Cuando nos vemos hablamos del Bar?a. Ni ¨¦l ni yo no ten¨ªamos la menor idea de qu¨¦ est¨¢bamos escribiendo. No hay ninguna relaci¨®n.

P. ?Por qu¨¦ la dedicatoria a Juan Garc¨ªa Hortelano?

R. Cuando estudi¨¦ en Madrid Ciencias Pol¨ªticas, ¨¦l fue mi protector y padre. Estuve tres a?os vaciando botellas de ginebra en su casa y escuchando sus historias. Es uno de nuestros mejores narradores, pero es a¨²n mejor cuando cuenta historias.