Francia eleva a Noah a la categor¨ªa de h¨¦roe nacional tras ganar la Copa Davis
El hombre que ha devuelto a los franceses las ganas de cantar a todo pulm¨®n La MarseIlesa se llama Yannick Noah. Naci¨® en Camer¨²n hace 31 a?os y tiene la piel del color del chocolate con leche. En esas circunstancias es f¨¢cil de entender que el ultraderechista Jean-Marie Le Pen no comparta el entusiasmo que se ha adue?ado de sus compatriotas. Noah es un¨¢nimemente considerado como el "brujo africano" que consigui¨® el "milagro" de la primera victoria de Francia en la Copa Davis desde 1932. 200 millones de pesetas es el premio que se repartir¨¢n los miembros del equipo.Una escena, presenciada por 10 millones de televidentes, lo explica todo: Noah encabezando una conga de todos los jugadores y t¨¦cnicos del equipo franc¨¦s de tenis. La conga da la vueIta a la cancha del polideportivo de Lyon cantando Saga Africa, el tema con el que el camerun¨¦s se estren¨® el pasado verano en el mundo de la m¨²sica pop. Delirando de felicidad, unos 8.000 espectadores corean la canci¨®n con el mismo ¨ªmpetu con que dos minutos antes han cantado La MarseIlesa, el himno nacional franc¨¦s.
La conquista de la Copa Davis no pudo llegar en mejor momento a un pa¨ªs sumido en lo que su presidente, Fran?ois Mitterrand, llama "la siniestrosis", la impresi¨®n de que todos los asuntos pol¨ªticos y econ¨®micos van mal e ir¨¢n todav¨ªa peor. Francia recibi¨® como un b¨¢lsamo el triunfo de Noah y los suyos.
"A golpes de raqueta", escribi¨® Jean-Pierre Delacroix en Lib¨¦ration, "Noah y los suyos mataron las moscas que sobrevuelan los cad¨¢veres pol¨ªticos y econ¨®micos que alfombran el suelo franc¨¦s". La victoria de Noah, a?adi¨® Delacroix, es "la victoria de Francia y su verdadera cara multicolor".
Tan entusiasmados como sus compatriotas, Mitterrand, y la primera ministra, Edith Cresson, fueron de los primeros que saludaron el regreso a Francia de la ensaladera de plata, 59 a?os despu¨¦s de la sexta y ¨²ltima victoria de los legendarios Mosqueteros. Dos de los supervivientes de aquel equipo, Ren¨¦ Lacoste y Jean Borotra, lloraron ante las c¨¢maras de televisi¨®n en el momento en que Forget remat¨® al norteamericano Sampras.
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