El 'carnicero de Milwaukee' descuart¨ªz¨® y devor¨® a sus v¨ªctimas, seg¨²n su abogado
La sangre ha comenzado a manchar la sala donde se desarrolla el juicio contra Jeffrey Dahmer, el carnicero de MiIwaukee. En supresentaci¨®n del caso, el letrado Gerard Boyle, uno de los mejores defensores del Estado de Wisconsin, donde se celebra el juicio, dijo ayer que su cliente era una especie de b¨¢rbaro pose¨ªdo por el diablo. Boyle, que comenz¨® por considerar a su defendido autor de todos los cr¨ªmenes que se le imputan, hizo una narraci¨®n escalofriante.
El abogado defensor inici¨® su presentaci¨®n del caso reconociendo que Dahmer es culpable de los 17 asesinatos que se le imputan. Reconoci¨®, adem¨¢s, que su defendido drog¨®, tortur¨®, viol¨® y descuartiz¨® a sus v¨ªctimas. Su relato sobre la infancia de Dahmer fue tan terror¨ªfico que dej¨® muy clara su intenci¨®n de que el acusado sea declarado un enfermo mental. Si consigue su prop¨®sito, Dahmer ser¨¢ enviado a una cl¨ªnica donde alg¨²n d¨ªa, si los m¨¦dicos lo creen oportuno, podr¨ªa recobrar la libertad.El Juicio de Milwaukee (WIsconsin) no pudo comenzar con m¨¢s espectacularidad. Boyle dijo que Dahmer es un asesino necrof¨ªlico motivado por la atracci¨®n sexual de los cuerpos varones mutilados sin vida. "Dahmer est¨¢ enamorado y atrapado por los personajes de la pel¨ªcula El exorcista III, cree que es Sat¨¢n y que su persona es la encarnaci¨®n del diablo", coment¨® el abogado mientras su cliente le miraba impasible.
Boyle deber¨¢ convencer a un jurado compuesto por siete hombres y siete mujeres de que Dahmer estaba enfermo en el momento de llevar a cabo la matanza m¨¢s sangrienta y cruel que se recuerda en este pa¨ªs. El juicio durar¨¢ entre una y dos semanas, y la primera jornada demostr¨® que ¨¦ste va a ser un juicio que pasar¨¢ a los anales de la historia de la criminalidad y la locura humana.Primera v¨ªctima
Boyle explic¨® sosegadamente y con todo detalle la infancia de Dahmer, "un joven enfermo, sin m¨¢s", y explic¨® la muerte de la primera v¨ªctima de su defendido, un autoestopista llamado Steven Hicks. El asesinato de Hicks se produjo en Ohio y no forma parte del sumarlo abierto contra Dahmer en Wisconsin.
El abogado explic¨® que la muerte de Hicks, que fue hallado descuartizado semanas despu¨¦s de su desaparici¨®n, fue el resultado de una adolescencia tormentosa, un periodo en el que Dahmer se masturb¨® constantemente, mientras imaginaba escenas er¨®ticas con cuerpos de varones mutilados. Sus sue?os se convertir¨ªan en realidad con el paso de los a?os.
"Su gran fantas¨ªa era mantener relaciones sexuales con personas comatosas, a punto de morir, y tras el orgasmo sol¨ªa descuartizar los cuerpos", explic¨® Boyle.
El abogado reconoci¨® que su cliente se comi¨® los ¨®rganos genitales y algunas de las v¨ªsceras de sus v¨ªctimas ...., ¨¦sa era la forma de dar vida a sus amantes y de mantener nuevas relaciones con ellos despu¨¦s de muertos".En 1982, Dahmer, explic¨® su abogado, trat¨® de enmendar su comportamiento y acudi¨® a una iglesia de Milwaukee para encontrar la paz. "Limit¨® sus masturbaciones a una vez por semana, incluso rob¨® un mu?eco en una tienda al que hizo pasar por su compa?ero sentimental para detener sus impulsos; poco tiempo despu¨¦s, la locura comenz¨® de nuevo", sigui¨® relatando el abogado.Moteles de carretera
A partir de ese momento comenz¨® lo peor. Dahmer ligaba constantemente con homosexuales j¨®venes, con los que manten¨ªa relaciones en hoteles y moteles de carretera. De vez en cuando le¨ªa las esquelas de los peri¨®dicos tratando de encontrar j¨®venes difuntos. En cierta ocasi¨®n trat¨® de desenterrar a un difunto para sodomizarlo en el cementerio, coment¨® el abogado, que record¨® que la polic¨ªa detuvo a Dahmer en 1980 por exhibicionismo.
Tras su puesta en libertad, Dahmer no hizo caso de los psiquiatras que le atendieron, pero les arranc¨® el nombre de las m¨¢s poderosas p¨ªldoras para dormir. Con aquellas recetas compr¨® las drogas con las que posteriormente reducir¨ªa a sus v¨ªctimas, para poder violarlas y descuartizarlas.
"Jeffrey Dahmer (que cuenta 31 a?os) es un enfermo necrof¨ªlico al que le encanta mantener relaciones sexuales con objetos sin vida", coment¨® Boyle, cuyo relato continuar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas con los detalles que rodearon la muerte de sus otras 16 v¨ªctimas.
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