Pilar Mir¨® gana el Oso de Plata a la calidad cinematogr¨¢fica con 'Beltenebros'

Muchos aplausos y algunos abucheos que no disimulaban su animadversi¨®n acompa?aron ayer a la proclamaci¨®n del filme norteamericano Grand Canyon, de Lawrence Kasdan, como ganador del Oso de Oro y, por tanto, triunfador absoluto de esta Berlinale. La extrema radicalidad y la fuerza subversiva de este magistral filme no se presta a las unanimidades. Casi todos los restantes premios tambi¨¦n produjeron algo de pol¨¦mica: el h¨²ngaro Istv¨¢n Szab¨®, que obtuvo el Premio Especial del Jurado con Dulce Emma, no se salv¨® de la divisi¨®n de opiniones, que se acentu¨® con la concesi¨®n a la espa?ola Beltenebros, de Pilar Mir¨®, de un Oso de Plata por sus "calidades cinematogr¨¢ficas".

La concesi¨®n del Oso de Plata a la mejor direcci¨®n al sueco Jan Troell por Il capitano despert¨® tambi¨¦n iras y aplausos, as¨ª como la decisi¨®n de conceder el Premio Alfred Bauer (en honor al fundador de la Berlinale y que se otorga a pel¨ªculas formalmente innovadoras y arriesgadas) a la pel¨ªcula rusa Infinitos, obra largu¨ªsima, densa y dif¨ªcil de ver, escrita y dirigida por Marlen Chuziev.Los ¨²nicos galardones que no fueron contestados por algunas voces disonantes del millar de periodistas acreditados aqu¨ª, que atestaban ayer la sala de conferencias de prensa del Kongresshalle berlin¨¦s, fueron: el Oso de Plata a la primera pel¨ªcula, que fue concedido al chileno Ricardo Larrain por La frontera, un filme de producci¨®n hispano-chilena que ha obtenido un notable ¨¦xito de p¨²blico y cr¨ªtica; y los premios a la interpretaci¨®n masculina al alem¨¢n Armin Mueller-Stahl por su trabajo en Utz, y femenina a la actriz china de Hong Kong Maggie Cheung, por su actuaci¨®n en Ruan Ling Yu.

Las dos ¨²nicas pel¨ªculas importantes que la, lista oficial de premios omiti¨® fueron las dos francesas. Por el contrario, la omisi¨®n de Cape Fear, la frustrada pel¨ªcula de Martin Seorsese, es justa. La ausencia de Todas las ma?anas del mundo, dirigida por Alain Corne¨¢u, se explica a medias por su reciente triunfo en la concesi¨®n de los premios Cesar franceses. En cambio, el silencio del jurado de la Berlinale ante Cuento de invierno, de Eric Rohmer, tiene m¨¢s dif¨ªcil explicaci¨®n y buena prueba de ello es su triunfo en los dos premios extraoficiales con prestigio y resonancia: el de la Cipresci o prensa internacional y el del llamado Jurado Ecum¨¦nico, que comparti¨® con Infinitas y Dulce Emma.

Elaboraron esta discutida lista de premios la actriz francesa Annie Girardot, que asumi¨® las funciones de presidenta del jurado; la actriz brit¨¢nica Susanna York; el cr¨ªtico espa?ol Fernando Lara, director del festival de Valladolid; el director georgiano Eldar Shengelala; Charles Champlin, cr¨ªtico del peri¨®dico estadounidense Los ?ngeles Times; el productor canadiense Irving Ivers; el historiador de cine alem¨¢n Wolfgang Klaue; Michael Verhoeven, director de cine alem¨¢n; Sylvia Chang, actriz china de Taiwan; Ildiko Enyedi, una documentalista h¨²ngara, y, finalmente, la productora israelita Dahlia Shapira.

Los Osos de Plata a Beltenebros y La frontera resumen el notable ¨¦xito obtenido en la Berlinale por el cine espa?ol, presente con tres pel¨ªculas en la competici¨®n y con otras tres en el Panorama, donde Vacas, de Julio Medem, y Martes de Carnaval, de Bauluz y Carvajal, salieron m¨¢s que airosas; mientras que El rey pasmado, de Imanol Uribe, triunf¨® en toda la l¨ªnea, convirti¨¦ndose en una de las pel¨ªculas m¨¢s celebradas y comentadas de las casi 200 que abarc¨® la programaci¨®n de esta edici¨®n del festival berlin¨¦s.

De haber entrado en competici¨®n, nadie duda aqu¨ª que no se hubiera ido de vac¨ªo, pues su acogida por el p¨²blico berlin¨¦s fue excelente. Y una vez m¨¢s hay evidencias de que la crisis galopante que padece el cine espa?ol no se debe a sus cineastas, sino al desamparo cada vez mayor en que ¨¦stos se encuentran.