Sime¨®n de Bulgaria y Y¨¦ley sellan en Madrid un pacto para afianzar la democracia

El Hotel Ritz de Madrid fue ayer escenario de una cita hist¨®rica. El ex rey Sime¨®n de Bulgaria y el actual presidente, Yeliu Yelev, ambos jefes de Estado -uno, en su tiempo, por la ley hereditaria de la monarqu¨ªa; otro actualmente, por la electoral-, fraguaron un "pacto de Estado" para la estabilizaci¨®n democr¨¢tica de su pa¨ªs, en plena lucha por liquidar los lastres de una dictadura comunista de nueve lustros y superar la ruina econ¨®mica, social y moral resultante. Las dos Bulgarias pactaban ayer en Madrid su reconciliaci¨®n nacional.

El ex rey Sime¨®n y el presidente de Bulgaria, Yeliu Yelev, enfrentados en un largo conflicto de declaraciones, acu?aron ayer en una hora de conversaciones en el hotel madrile?o, f¨®rmulas de cooperaci¨®n para integrar a Bulgaria en el concierto internacional de naciones tanto econ¨®mico como pol¨ªtico. "Ha sido un dialogo cordial, pragm¨¢tico y positivo", declar¨® el ex soberano tras el encuentro. "El presidente [Yelev] tiene el pragmatismo que requiere actualmente el pa¨ªs". Yeliu Yelev, cuya base electoral est¨¢ compuesta en gran parte por republicanos irredentos, rindi¨® ayer honores al ¨²nico antiguo monarca en el exilio procedente de los pa¨ªses ex socialistas del Este de Europa que parece tener alguna posibilidad de asumir un papel de arbitro de la transici¨®n.

Tras la reuni¨®n, los periodistas b¨²lgaros llegados a Madridse avalanzaron sobre Sime¨®n de Bulgaria, ignorando por completo al presidente que abandon¨® r¨¢pidamente el hotel camino del aeropuerto. Sime¨®n, con un impecable b¨²lgaro, pese a haber salido del pa¨ªs en 1946, cuando ten¨ªa apenas nueve a?os, explic¨® que espera de sus compatriotas, ante todo, "trabajo, trabajo, trabajo" para salir de la situaci¨®n creada por el r¨¦gimen fenecido.

Cordura y pragmatismo

Sin embargo, reconoci¨® "cordura y pragmatismo" a la actual clase pol¨ªtica de su pa¨ªs y se mostr¨® muy conciliador con el presidente Yelev, que capea actualmente una crisis institucional muy seria. Sime¨®n de Bulgaria quiso ayer quitar relieve al enfrentamiento entre partidarios de los dos sistemas de Estado. "No hablamos sobre la restauraci¨®n dela monarqu¨ªa. Ten¨ªamos otras prioridades, en el terreno pol¨ªtico y econ¨®mico. No hay que precipitar nada. En su momento se plantear¨¢n las cuestiones de legitimidad".

Yelev hab¨ªa criticado dur¨ªsimamente al Rey Sime¨®n en una entrevista concedida a EL PA?S el pasado mes de febrero, y descalific¨® a la dinast¨ªa como colaboradora de la Alemania fascista durante la II Guerra Mundial.

Ayer, colaboradores del presidente de la rep¨²blica, en la antesala del lugar de la reuni¨®n, insist¨ªan en sus cr¨ªticas al ex rey. ?ste, sin embargo, se mostr¨® muy conciliador y no excluy¨® su apoyo al actual jefe del Estado en los esfuerzos por estabilizar la situaci¨®n institucional en Bulgaria, sacudida por luchas internas en la Uni¨®n del Frente Democr¨¢tico, partido mayoritario en el Gobierno.

El dilema entre monarqu¨ªa o rep¨²blica no ha sido superado por la nueva constituci¨®n y el retomo de Sime¨®n como jefe del Estado es una de las hip¨®tesis a debate pol¨ªtico en el pa¨ªs balc¨¢nico. Las declaraciones de Yelev a EL PA?S, ampliamente difundidas en Bulgaria, hab¨ªan abierto nuevos enfrentamientos entre partidarios y adversarios de la monarqu¨ªa.

Colaboradores del presidente negaron en un principio sus descalificaciones de la monarqu¨ªa. Finalmente, por v¨ªas extraoficiales, Yelev reconoci¨® que perdi¨® los nervios ante la insistencia de preguntas sobre la monarqu¨ªa, cuya popularidad en Bulgaria cada vez es mayor.