El Papa visitar¨¢ Angola al cumplirse el primer aniversario de la firma de la paz
Un a?o despu¨¦s de la firma, en Lisboa, de los acuerdos de paz que pusieron fin a cerca de 30 a?os de guerra en Angola, la antigua colonia portuguesa se prepara a recibir al papa Juan Pablo II, que llegar¨¢ el mi¨¦rcoles a Luanda.Hace un a?o que salieron de Angola los ¨²ltimos contingentes del cuerpo expedicionario cubano, de cerca de 50.000 hombres, que apoyaron militarmente al r¨¦gimen marxista-leninista, en el poder en Luanda desde la independencia en 1975. La visita del Papa coincide as¨ª con el primer a?o de paz en Angola despu¨¦s de 12 a?os de guerra contra la dominaci¨®n colonial portuguesa y 17 a?os de guerra civil entre el Gobierno angole?o, apoyado por la ex URSS, y los guerrilleros de la UNITA de Jon¨¢s Savimbi, con apoyo de EE UU y Sur¨¢frica.
Todas las fases del proceso de paz, iniciado el 31 de mayo de 1991 bajo la mediaci¨®n de Lisboa, Mosc¨² y Washington, se est¨¢n cumpliendo con ¨¦xito, pero con grandes retrasos en relaci¨®n al calendario previsto. A cuatro meses de las elecciones generales, se?aladas para la tercera semana del pr¨®ximo mes de septiembre, el acantonamiento de las tropas gubernamentales y de la guerrilla no est¨¢ terminado.
Savimbi sigue convencido de que ser¨¢ el pr¨®ximo presidente de Angola, a pesar de la crisis pol¨ªtica que acaba de sacudir su organizaci¨®n con la deserci¨®n de Tony da Costa Fernandes y Nzau Puna, respectivamente, ex n¨²mero dos y tres de la UNITA.
Los dos generales de la UNITA han denunciado p¨²blicamente las ejecuciones, el pasado verano, de los ex delegados del movimiento de Savimbi en Washington y en Lisboa, Tito Chitungi y Wilson dos Santos y de sus familias. Sus testimonios acerca de reiteradas y graves violaciones de los derechos humanos por la UNITA han afectado seriamente el prestigio internacional de Savimbi y el apoyo de que siempre goz¨® en el Congreso norteamericano. Para Savimbi, la deserci¨®n de Fernandes y Puna forma parte de una conspiraci¨®n, organizada por el r¨¦gimen de Luanda y sus servicios secretos.
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