La interminable tragedia de Bosnia
Tres nuevos factores amenazan con devolver a las primeras p¨¢ginas de la prensa internacional la guerra en Bosnia-Herzegovina, que, pasada la novedad y agotado el estupor de los primeros meses de matanzas, parece haber sido asimilada por la opini¨®n p¨²blica mundial como una tragedia irremediable. Primero: la Alta Comisar¨ªa de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha advertido que 400.000 personas est¨¢n bajo aguda amenaza de muerte en los pr¨®ximos meses de invierno en Bosnia-Herzegovina.Las im¨¢genes de familias enteras muertas de fr¨ªo y hambre pueden pronto ser un plato cotidiano de los informativos de sobremesa. Ya es tarde para organizar un sistema de invernaci¨®n para los m¨¢s de dos millones de seres que han quedado sin hogar en esta guerra.
La suspensi¨®n de los vuelos de ayuda a Sarajevo, tras el derribo del avi¨®n italiano, dispar¨® la amenaza de una inmensa cat¨¢strofe humanitaria. Fuera quien fuera el autor del derribo del avi¨®n, s¨®lo benefici¨® a quienes quieren expulsar de Bosnia a la poblaci¨®n, musulmana, serbia y croata, que se niega a la segregaci¨®n racial que es la cantonalizaci¨®n ¨¦tnica.
La ingente y muchas veces heroica labor de los voluntarios de la ACNUR, dirigidos por el espa?ol Jose Mar¨ªa Mendiluce, es uno de los pocos cap¨ªtulos de esta guerra tendentes a fortalecer la fe en la condici¨®n humana. Sin embargo, cuando llegue la pr¨®xima primavera, decenas de miles de personas, que hoy deben la vida a Mendiluce y su organizaci¨®n, formar¨¢n parte de las interminables listas de muertos en Bosnia que nunca podr¨¢n elaborarse. La ¨²nica salvaci¨®n para muchos es ya la evacuaci¨®n a otros pa¨ªses, por mucho que indigne la certeza de que as¨ª se cumplen los objetivos de la limpieza ¨¦tnica.
El segundo acontecimiento que puede reactivar la guerra es el anuncio de miles de croatas que amenazan con volver a sus hogares en Eslavonia oriental, ocupados por las fuerzas serbias. Estas han advertido que los croatas ser¨¢n recibidos a tiros. La acci¨®n desesperada de los refugiados, detenida por el momento, revela uno de los mayores fracasos de la intervenci¨®n de la ONU en la guerra.
Eslavonia oriental, Banija, Kordun y Krajina, regiones ocupadas por las fuerzas serbias, est¨¢n bajo supuesto control de los cascos azules desde principios de este a?o. Pese a esta presencia de tropas internacionales, la guerrilla serbia, reconvertida en polic¨ªa local, ha proseguido con, la limpieza ¨¦tnica.
La presencia de los cascos azules no sirve sino para evitar que las autoridades croatas, ahora que sus fuerzas militares no se hallan ya en la inferioridad de armamento que las conden¨® a perder este territorio, puedan restablecer all¨ª la soberan¨ªa del Gobierno de Zagreb. El presidente croata, Franjo Tudjman, ya ha anunciado que no renovar¨¢ el mandato para la presencia all¨ª de los cascos azules.
Sucumbir a la tentaci¨®n
La guerra en Croacia puede, por tanto, estar cerca de entrar en su segunda fase, a no ser que el presidente croata sucumba definitivamente a sus tentaciones de repartirse Bosnia con la enemiga Serbia. Tudjman parece ahora tentado de llegar a un acuerdo con los representantes de la llamada nueva Yugoslavia, el presidente Dobrica Cosic y el primer ministro Milan Panic.El tercer elemento que sugiere una reactivaci¨®n de la triste actualidad bosnia es la creciente presencia militar internacional. Los adversarios de una intervenci¨®n militar armada, que arguyen que podr¨ªa suponer un "interminable Vietnam" para las tropas internacionales, est¨¢n condenando a la comunidad internacional precisamente a lo que quer¨ªan evitar.
Una acci¨®n militar contra artiller¨ªa, aeropuertos e instalaciones estrat¨¦gicas serbias hubiera demostrado a las fuerzas serbias que la agresi¨®n tiene un precio y que las leyes internacionales tienen qui¨¦n las defienda y penalice al infractor. El lento y doloroso cambio de correlaci¨®n de fuerzas, pese al embargo, ya est¨¢ produciendo, como se ha visto en Ginebra, la primera disposici¨®n real a negociar por parte de Belgrado.
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