Moral de acero

Algunos ayudaron a construir los primeros hornos de Ensidesa en Asturias. Otros s¨®lo los han visto cerrar. Todos coinciden en que "la fuerza de la raz¨®n tiene que hacer ceder al Gobierno" en sus prop¨®sitos de reconversion sider¨²rgica, si no "aplicar¨ªamos nuestra teor¨ªa de la liberaci¨®n", dice, con un punto p¨ªcaro, uno de los abuelos de la marcha de hierro, Joaqu¨ªn D¨ªaz, de 69 a?os, 30 de ellos pasados en la factor¨ªa de Avil¨¦s y jubilado hace ocho. La vertiente asturiana de la marcha de hierro dej¨® el martes la monta?a astur-leonesa para adentrarse en la meseta, y la vasca ya est¨¢ en Burgos.A Joaqu¨ªn le faltan, dos dedos de un pie por un accidente laboral. "?As¨ª, menos ampollas!", comenta con una alegr¨ªa propia de un chaval. En 1954, con Montajes Nervi¨®n, hizo la primera columna del horno Carmen, el primero de Ensidesa. "Ahora no aguanto sin llorar cuando voy por all¨ª; todo casi muerto. Por eso estoy aqu¨ª".

El paisaje en el que se adentran tiene un fr¨ªo de horizonte infinito que se traga la mirada, pero que se caldea con el clamor popular espont¨¢neo de sus gentes. "?Viva Asturias!", "gracias se?ora". "Pobres, ?son mineros?". "No, somos del hierro", responde uno de ellos. "?Qu¨¦ no tienen trabajo?". "No, que no lo queremos perder".

Ayer los 245 trabajadores restaron ya 160 a los 490 kil¨®metros del trayecto que concluir¨¢ el d¨ªa 26 en Madrid. Atr¨¢s queda Pajares y los pueblos mineros de Asturias y Le¨®n, donde la acogida "no pudo ser mejor". Tambi¨¦n se aleja la lluvia. La sexta etapa Le¨®n-Valenc¨ªa de Don Juan, de 38 kil¨®metros de distancia fue ayer una de las jornadas m¨¢s largas. [Mientras, sus compa?eros de Altos Hornos de Vizcaya, unos 500, van consumiendo tambi¨¦n kil¨®metros y ayer llegaron a Briviesca (Burgos)].

Gasto en medicinas

A las 6.30 de la ma?ana de ayer los trabajadores, acostumbrados al primer turno "pelan el ojo" en el polideportivo Gumersindo de Azc¨¢rate de Le¨®n. Despu¨¦s de un reconfortante caf¨¦ caliente con magdalenas en el bar San Vicente y pertrechados con ch¨¢ndales multicolores, calzado deportivo, y la tradicional cacha parten con ¨¢nimo a las nueve de la ma?ana por la carretera de Benavente (Zamora) camino de Valencia de Don Juan. "Hoy ten¨¦is buen d¨ªa, adelante compa?eros", grita en el arc¨¦n de la carretera un reducido grupo de trabajadores de Vidriera Leonesa, vestidos con mono azul.

Juan Campa, responsable del operativo de Cruz Roja, hace un recuento de las intervenciones de la noche anterior mientras conduce la UVI m¨®vil. "En conjunto fueron 480. Rozaduras, ampollas, tendinitis... ". Hoy hay una baja, la ¨²nica. desde el inicio de la marcha. H¨¦ctor Roces "con un menisco roto" tuvo que ser trasladado a Asturias en una ambulancia. Un tir¨®n en una pierna hab¨ªa obligado la noche anterior al laminador Jorge Juan Garc¨ªa, de 44 a?os, apodado Ba?ugues, a permanecer tres horas en el hospital del Insalud de Le¨®n. Jer¨®nimo Blanco se reincorpor¨® el martes a la marcha despu¨¦s de enterrar a su madre. "Mira, ¨¦se de ah¨ª tuvo un infarto hace meses y al que va detr¨¢s le quitaron la escayola de la pierna el otro d¨ªa", explica Campa.

El coste diario en medicamentos supera las 55.000 pesetas. "?Y qu¨¦ nos haga tirarnos a la carretera Felipe!, al que yo he votado y votar¨¦ siempre", se queja Banugues, mientras acelera el paso. Una marioneta "vestida de Ner¨®n" con "la cara del presidente del Gobierno" es la mascota de la marcha. "Tiene vendado el pie izquierdo porque es e que mas problemas le da. Ahora, anda con la derecha", dice Manuel ?lvarez, Lito de Mieres, de 45 a?os. Durante. las protestas de la primera reconversi¨®n sider¨²rgica, Lito permaneci¨® 24 horas colgado en una chimenea de la f¨¢brica de Mieres. Procesado por los sucesos del pasado invierno en el pozo Barredo de Hunosa, asegura que los asturianos ya no pueden coger la maleta m¨¢s. d¨®nde vamos ahora?... "?Pa el mar o pa un acantilado?". Lito recorre a diario cerca de 100 kil¨®metros para acudir a su puesto de trabajo en Gij¨®n.

Mayte Fontanellas, una de las dos mujeres con las que cuenta la marcha, recuerda que su hija le dijo: "?Vaya humor que tienes mami!". Sucesivas curas en ruta con piel artificial mantienen en pie a esta trabajadora de Veri?a.

En la capital leonesa se han sumado a la marcha 50 trabajadores de las instalaciones de Gij¨®n. Es su d¨ªa libre. Bea, de 16 anos, es la hija de uno de ellos. "Ah¨ª arriba quieren un pa¨ªs de jubilados y nosotros no, ?a ver qui¨¦n gana?", afirma un trabajador, en tono amenazante.

Durante el trayecto se reparten peri¨®dicos, uvas pasas, batidos, botellas individuales de agua minera y yogures. En dos horas se han consumido 45 vajas de bebidas refrescantes, de 10 unidades cada una.

Los trabajadores de la siderurgia integral marchan hacia Madrid para protestar por el plan de reconversi¨®n del sector que supone la reducci¨®n de la capacidad de 5,6 a 4,1 millones de toneladas, y el recorte de la plantilla en 9.707 empleados, entre AHV y Ensidesa, sobre un total de 26.000.