Aranzadi responde a la 'marcha de hierro' que no negociar¨¢' el plan industrial, pero si el laboral
El ministro de Industria, Claudio Aranzadi, comunic¨® ayer a los secretarios generales de las federaciones del metal de UGT, CC OO, ELA-STV, USO y LAB que "no se tocar¨¢ ni una coma del plan industrial" elaborado por la Corporaci¨®n de la Siderurgia Integral, aunque admiti¨® que "el plan laboral se seguir¨¢ negociando a partir del jueves". Esta reuni¨®n culminaba la marcha de hierro sobre Madrid que m¨¢s de 700 trabajadores de AHV y Ensidesa iniciaron hace 18 d¨ªas para forzar el cambio de este plan, que prev¨¦ la reducci¨®n de la producci¨®n sider¨²rgica y la desaparici¨®n de 9.707 puestos de trabajo.
Los trabajadores de AHV y Ensidesa, procedentes de Asturias y el Pa¨ªs Vasco, culminaron su marcha de hierro sobre Madrid con una multitudinaria manifestaci¨®n que acab¨® ante la sede del Ministerio de Industria. All¨ª, a las 17.30 de la tarde, el ministro Claudio Aranzadi recibi¨® a los secretarios generales de las federaciones del metal de los sindicatos representados en ambas empresas (UGT, CC OO, ELA-STV, USO y LAB), pero a ning¨²n participante en la marcha.En la reuni¨®n, que dur¨® poco m¨¢s de 30 minutos, Aranzadi les comunic¨® que no se va a modificar el plan industrial dise?ado por la Corporaci¨®n de la Siderurgia Integral (CSI), que reduce la producci¨®n sider¨²rgica de los 5,6 millones de toneladas anuales actuales a 4,5 millones y elimina 9.707 puesto de trabajo. Adem¨¢s, desmantelar¨¢ dos de los seis hornos de Ensidesa y los tres de AHV. Estos ¨²ltimos ser¨¢n sustituidos por una miniacer¨ªa de compacto con capacidad para 900.000 toneladas situada en Sestao. Aranzadi insisti¨® en que "este plan es el mejor de los posibles, tal y como ha reconocido la Comunidad Europa".
La marcha de hierro ped¨ªa que la producci¨®n no bajara de los 5 millones de toneladas anuales, lo que supondr¨ªa un ajuste de plantilla menor al previsto en el plan elaborado por Industria.
Reapertura de la mesa
No obstante, el ministro no cerr¨® todas las puertas a la negociaci¨®n. Dej¨® abierta la del plan laboral, que se comenzar¨¢ a renegociar a partir del pr¨®ximo jueves. En esa reuni¨®n se fijar¨¢ "cu¨¢ndo, c¨®mo y de qu¨¦ manera se reabre la mesa negociadora de la siderurgia", se?alaron tanto los sindicatos como Claudio Aranzadi.
El plan laboral del Gobierno, al que se destinar¨¢n 300.000 millones de pesetas inicialmente, prev¨¦ reducir la plantilla mediante jubilaciones, prejubilaciones y bajas incentivadas. Los trabajadores afectados se acoger¨¢n a las jubilaciones anticipadas a partir de los 52 a?os y recibir¨¢n en ese momento el 77% de su salario bruto, equivalente al 92% neto. Adem¨¢s, su fecha real de jubilaci¨®n ser¨¢ a los 60 a?os.
Los sindicatos piden que "los trabajadores que se prejubilen a los 52 a?os alcancen la jubilaci¨®n definitiva a los 65, para que su pensi¨®n se calcule con el 100% de su base reguladora, como en el caso de cualquier ciudadano".
La propuesta de Aranzadi, trasladada inmediatamente a las cerca de 40.000 personas concentradas ante la sede de Industria, provoc¨® una reacci¨®n un¨¢nime en los sindicatos: anunciar nuevas movilizaciones. Unas movilizaciones que, al menos en versi¨®n de los responsables del metal de UGT (Manuel Fern¨¢ndez Lito) y de LAB (Patxo Cereceda), pueden llegar "a la fuerza en caso de que no triunfe la raz¨®n que nos asiste".
El resto de las centrales (CC OO, ELA-STV y LAB) no llegaron a manejar la palabra "fuerza", aunque coincidieron en solicitar reiteradamente la dimisi¨®n tanto del presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, como del titular de Industria.
Una buena parte de las alocuciones de los, representantes sindicales se centr¨® en el tema pol¨ªtico. Todos ellos pidieron un voto de castigo al PSOE en las pr¨®ximas elecciones generales. Una frase del secretario general de la Federaci¨®n del Metal de CC OO, Igancio Fern¨¢ndez Toxo, resumi¨® de la siguiente forma el sentir sindical: "El pa¨ªs real exige otra pol¨ªtica econ¨®mica e industrial. Por ello, vamos a insistir en las movilizaciones. Pero si no surten efecto, ah¨ª est¨¢n las urnas. Lo tienen que pagar en la pr¨®xima cita electoral".
La ¨²ltima etapa de la marcha de hierro cont¨® con la presencia de los secretarios generales de UGT y CC OO, Nicol¨¢s Redondo y Antonio Guti¨¦rrez. El l¨ªder ugetista estuvo especialmente cr¨ªtico con la conmemoraci¨®n de los diez a?os 'del triunfo electoral del PSOE. "?sta es la Espa?a contrapuesta. Ayer se celebraba la d¨¦cada prodigiosa y hoy vemos que no es para tanto". Guti¨¦rrez se limit¨® a comentar que "la marcha de hierro es la marcha de la raz¨®n".
500 kil¨®metros en las suelas
S. G. C. / J. R. Sus rostros agotados y su andar cansino reflejaban los 500 kil¨®metros que han recorrido a pie para forzar al Gobierno a que cambie su plan para reestructurar la siderurgia. La barba de varios d¨ªas, las caras curtidas por el aire, el fr¨ªo y el sol y unos pies que se volv¨ªan torpones en el asfalto de Madrid les delataba como los 700 compa?eros del metal que integraron la marcha de hierro durante 18 d¨ªas.
Cuando entraron en Madrid, los 700 metal¨²rgicos s¨®lo tuvieron un sentimiento: la emoci¨®n. Mart¨ªn Garc¨ªa, de 44 a?os, miembro de la marcha de hierro, dice con acento asturian¨ªn que al entrar en Madrid y ver el recibimiento "he sentido una emoci¨®n muy grande, no hay palabras para describirlo". Su compa?ero Fernando Tamargo, de 38 a?os, reconoce que "nunca nos imaginamos esto a pesar de que sab¨ªamos que llegaban a Madrid 500 autocares".
Mariano Vi?a recuerda que el recorrido "ha sido muy duro" y que el mal tiempo fue "nuestro mayor enemigo". "Hemos dormido en iglesias, polideportivos y tiendas de campana, pero al llegar aqu¨ª todos esto se olvida por la enioci¨®n". El marchador califica la segunda jornada como "infernal" porque "el agua empap¨® nuestras zapatillas y tuvimos que andar llenos de ampollas".
Jose Mar¨ªa Arroza comenta que en un pueblo de Burgos "dormimos en una casa deshabitada desde 1959" e Isidro Barrachina echa pestes cuando se acuerda de que el alcalde de Buitrago "nos quer¨ªa alojar en un matadero abandonado". Lograr que los afectados por el plan de Industria se prejubilen en unas buenas condiciones fue lo que anim¨® a Francisco Medina, de 68 anos, a participar en la marcha desde Oviedo hasta Madrid. "He trabajado 33 a?os en Ensidesa y me jubil¨¦ a los 61 a?os con unas buenas condiciones, pero las que van a imponer a mis compa?eros son criminales y no me pod¨ªa quedar indiferente antes esta injusticia", se?ala.
Una masa ingente decorada por ikurri?as y banderas asturianas -los sindicatos calculan 40.000 personas- les recibi¨® en Madrid al son de las gaitas y al grito de "el Norte se salva luchando". Algunos no pudieron reprimir la emoci¨®n y las l¨¢grimas ca¨ªan por sus rostros a medida que la marcha de hierro hac¨ªa su vuelta al ruedo. Otros no pudieron resistir la tentaci¨®n de hacer cola ante una administraci¨®n de loter¨ªa para comprar un d¨¦cimo de Navidad.
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