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La amenaza de la agencia de calificaci¨®n de riesgos Moody's de rebajar la solvencia del Reino de Espa?a ha provocado un escalofr¨ªo que ha recorrido todo el sistema financiero espa?ol. Bancos y cajas se han mirado al ombligo y han comenzado a temer por una rebaja en su calificaci¨®n que autom¨¢ticamente les supone encarecer los intereses de sus emisiones en los mercados internacionales, as¨ª como mayores dificultades a la hora de colocarlas.

Si al final la firma norteamericana rebaja la calificaci¨®n de la deuda espa?ola, todos los bancos y empresas espa?oles pueden verse revisados a la baja con lo que se producir¨ªa un efecto domin¨® de importantes consecuencias. Fuentes de Econom¨ªa, el departamento que dirige Carlos Solchaga, y del Banco de Espa?a, que preside Luis ?ngel Rojo, han mostrado su esperanza de que no se produzca tal rebaja.El informe de Moody's, la agencia norteamericana m¨¢s conocida junto con Standard and Poor's para calificar los productos de deuda y renta fija, resalta los desequilibrios de la econom¨ªa espa?ola y sus escasas posibilidades de crecimiento para 1993 como argumentos para una posible rebaja de la calificaci¨®n. Este hecho encarecer¨ªa la financiaci¨®n del d¨¦ficit p¨²blico.

La otra agencia norteamericana, Standard and Poor's ha se?alado que no tiene previsto revisar la calificaci¨®n de la deuda espa?ola. Al final, siempre es el mercado el que valora una posible divergencia entre las grandes agencias de rating. Estas dos empresas son las dos grandes firmas con reconocimiento de los mercados internacionales, seg¨²n confirman el mercado y las propias empresas. Han hecho calificaci¨®n de pr¨¢cticamente todos los pa¨ªses desarrollados y en v¨ªas de desarrollo y de las principales multinacionales emisoras de renta fija.

M¨¦todos diferentes

Tienen distinto m¨¦todo, ya que mientras Moody?ss califica le faacilitte o no los datos el cliente, Standard and poor's solamente califica a los pa¨ªses o empresas que faciliten todos sus datos.En Estados Unidos, que lleva mucha ventaja en este terreno tanto a Europa como a Jap¨®n, bancos y empresas, por ley, deben contar con dos calificaciones y en estos momentos el mercado comienza a pedir un tercer an¨¢lisis que sirva de desempate en muchos casos.

En Europa, el primer intento de formar una agencia de cierto nivel es IBCA que cuenta en este momento con el 70% de su capital en manos francesas y un 30% en manos brit¨¢nicas. IBCA se centra en la calificaci¨®n de los bancos. Alemania aborda actualmente un proyecto para crear una agencia de rating mientras el resto de los pa¨ªses cuentan con agencias de tipo local. En Jap¨®n sus principales someten a los criterios de las grandes firmas norteamericanas.

Las agencias de calificaci¨®n son empresas privadas, independientes, que cobran por servicios. Los clientes son quienes deciden si el resultado del an¨¢lisis se hace p¨²blico o no, aunque cuando es un pa¨ªs se da por hecho que se publica. La independencia de las agencias es su principal activo, afirma Juan de la Mota G¨®mez-Acebo, consejero delegado de Iberating, filial espa?ola de Standard and Poor's.

Seg¨²n el primer ejecutivo de Iberating el an¨¢lisis comprende "no s¨®lo la evaluaci¨®n aislada sino tambi¨¦n la posici¨®n competitiva en los mercados". Para ello, a?ade, se "analiza el riesgo sectorial, la posici¨®n del emisor en el mercado, la solidez financiera, la estructura accionarial y el apoyo del p¨²blico".

Calificaci¨®n de riesgo

En Espa?a la calificaci¨®n de riesgo apenas existe. Tan s¨®lo la firma Research Associates, intenta mejorar el nivel de rating. Jaime Marietegui, su director, se?ala que "m¨¢s que la foto fija actual de la empresa o banco, lo importante es calcular lo que puede generar en el futuro para devolver los cr¨¦ditos, bajar las deudas o afrontar imprevistos".Para Thomas Saul, director de la oficina en Espa?a de IBCA, los analistas que efect¨²an rating deben contar con una gran experiencia en el sector financiero. "La credibilidad de los analistas, es la base del negocio por lo que la independencia es la clave del ¨¦xito. Nunca hacemos calificaciones sin que el cliente nos facilite sus datos pormenorizados ya que nos ver¨ªamos forzados a realizar el an¨¢lisis con los datos sectoriales y p¨²blicos sobre el cliente y el resultado ser¨ªa pobre".

Lo que si que puede ocurrir, a?ade, es que un tercero nos en carge un estudio de calificaci¨®n sobre tal o cual sector, banco o empresa y "nosotros lo realizamos con los datos p¨²blicos disponibles, aunque no sea tan completo". El mercado espa?ol desde la pasada semana ya cuenta con una oficina de Moody's aunque la firma opera en Espa?a desde el a?o 1988.