Las cr¨ªticas a Arriort¨²a y la direcci¨®n de Volkswagen arrecian en Alemania

El apoyo de Volkswagen a su ejecutivo Jos¨¦ Ignacio L¨®pez Arriort¨²a empieza a flaquear. Las dimensiones cada vez mayores que est¨¢ tomando, a nivel legal, el enfrentamiento entre el constructor alem¨¢n y la multinacional norteamericana General Motors, que acusa al ejecutivo espa?ol de haberse llevado documentos secretos cuando abandon¨® GM, ha provocado ya una baja considerable de las acciones de VW y levantado las cr¨ªticas en la prensa germana contra L¨®pez y su valedor, el director general del grupo, Ferdinand Pi?ch.

Hoy se conocer¨¢ la decisi¨®n del Tribunal Territorial de Hamburgo en la querella que enfrenta a VW con el semanario Der Spiegel, que ha recurrido la prohibici¨®n del juez de seguir afirmando que L¨®pez Arriort¨²a protagoniz¨® la mencionada operaci¨®n de espionaje industrial.

El caso, aunque t¨¦cnicamente no tiene nada que ver con el que lleva la fiscal¨ªa de Darmstadt y que enfrenta a Opel —la filial alemana de GM—con VW, influir¨¢, sin duda, en el contexto general del choque que, con L¨®pez Arriort¨²a de por medio, protagonizan los l¨ªderes automovil¨ªsticos de Europa y Estados Unidos.

Una veintena de testigos, todos ellos empleados de Opel y todos ellos en un sentido incriminatorio contra L¨®pez, han declarado ante el juez de Hamburgo mencionando casos concretos de documentos que ¨¦ste pidi¨® y que le fueron entregados, algunos de ellos muy pocas fechas antes de su marcha a VW.

Por si esto fuera poco, General Motors ya ha confirmado que el Departamento de Justicia Norteamericano, a trav¨¦s de la Oficina de Investigaci¨®n Federal (FBI), investiga la posible sustracci¨®n de documentos secretos por parte del ejecutivo espa?ol cuando abandon¨® Detroit.

La ca¨ªda, el viernes pasado, de las acciones de Volkswagen en la Bolsa de Francfort, donde bajaron 5, 20 marcos pese a una subida general del mercado, se considera como una se?al de que el caso empieza a hacer mella en los inversores. En la prensa alemana han empezado ya las cr¨ªticas abiertas, no s¨®lo contra L¨®pez Arriort¨²a, sino tambi¨¦n contra Ferdinand Pi?ch, a quienes se acusa de da?ar irremisiblemente la imagen de VW y de la industria alemana.

En estas circunstancias no es de extra?ar que el tono de la casa de Wolfsburg, el cuartel general de VW, con respecto al ejecutivo espa?ol haya empezado a cambiar sutilmente.

Dudas en VW

De las primeras declaraciones en las que se le mostraba un apoyo incondicional y sin grietas se est¨¢ pasando a matices que parecen indicar que las dudas han empezado a hacer mella en algunos miembros del Consejo de Administraci¨®n del gigante automovil¨ªstico alem¨¢n.

Uno de ellos, Klaus Liesen, en unas declaraciones a Welt am Sonntag, tras precisar que cre¨ªa que las acusaciones contra L¨®pez eran infundadas, matiz¨® que, de momento, "no hay ninguna nueva evidencia que me haga cambiar la declaraci¨®n de confianza que le di en la ¨²ltima reuni¨®n del consejo".

"Nos dijo", a?adi¨® Liesen, "que no hab¨ªa nada en las declaraciones contra ¨¦l y sus colaboradores. Esta fue la base de nuestra declaraci¨®n de confianza en ¨¦l y, hoy en d¨ªa, no veo ninguna raz¨®n para pensar de otra manera".

Posteriormente, Klaus Liesen dijo que el ejecutivo espa?ol, que ingres¨® en Volkswagen el mes de marzo pasado, es "el mejor en su puesto".