Christie gana c¨®modamente a Lewis los 100m

El viejo Christie gan¨® el duelo millonario. El atleta brit¨¢nico venci¨® con comodidad al estadounidense Carl Lewis en la carrera de 100 metros de Gateshead (Reino Unido). En juego estaban algo m¨¢s que los 20 millones de pesetas para cada uno de los dos grandes campeones. Se ventilaba m¨¢s que nada el orgullo despu¨¦s de dos meses de retos y declaraciones desafiantes. Christic gan¨® con un registr¨® excelente (10.08 segundos) para las condiciones del d¨ªa. Fue una tarde de verano ingl¨¦s: fresca y lluviosa. Lewis s¨®lo pudo alcanzar el tercer puesto, con un registro mediocre (10.21).

La vena competitiva de Christie puede con el da?o de la naturaleza. Superada la barrera de los 33 a?os, el atleta ingl¨¦s mantiene su esp¨ªritu guerrero. Apareci¨® en la pista con el gesto concentrado, muy seco, sin dirigir la palabra a nadie. A su lado, en la quinta calle, Lewis tambi¨¦n ten¨ªa el gesto serio, pero su nivel de concentraci¨®n era menor. Despu¨¦s de una larga campa?a de desaf¨ªos en los medios de comunicaci¨®n, Christie hab¨ªa llegado a la carrera con m¨¢s cuentas pendientes. Carl Lewis le hab¨ªa tachado de cobarde por eludirle, un ataque muy serio contra un atleta que gasta fama de duro. En el rostro de Christie se advert¨ªa la tensi¨®n; en el de Lewis no hab¨ªa nada especial: una carrera m¨¢s, pero bien pagada.La prueba estaba preparada para los dos. S¨®lo el peque?o Jon Drummond, un velocista que trata de ganarse un puesto en la primera cuerda de especialistas, ten¨ªa algo que decir. El resto era material de relleno. Lewis y Christie llegaban con un historial trufado de ¨¦xitos -ambos son campeones ol¨ªmpicos y tiene una larga lista de haza?as-, pero en la guerra particular la ventaja era abrumadora para el norteamericano. S¨®lo una vez hab¨ªa conseguido Christie superar a Lewis -Montecarlo, 1988-. En los otros 11 enfrentamientos sobre los 100 metros, Carl Lewis le hab¨ªa vencido, incluidas una final ol¨ªmpica y dos campeonatos del Mundo.

La carrera cambi¨® de protagonistas despu¨¦s de la salida falsa de Calvin Smith. En la segunda, Jon Drummond volvi¨® a confirmar su facilidad para arrancar. Christie salt¨® r¨¢pido de los tacos. Lewis tard¨® un poco m¨¢s, aunque su desventaja no fue muy apreciable. La peor parte de la actuaci¨®n de Lewis vino entre los 10 y los 50 metros, donde perdi¨® el tren de Christie. El brit¨¢nico se vio muy comprometido por Drummond, que corri¨® por encima de lo previsto.

En la mitad de la prueba, Lewis ya era el perdedor del duelo. La posibilidad de recuperaci¨®n era imposible frente a un rival que tambi¨¦n tiene su punto fuerte en el tramo final la distancia. La ¨²nica interrogante radicaba en la resistencia de Drummond. En el paso por los 80 metros comenz¨® a ceder. Lewis se recuperaba, pero parec¨ªa poco atento a su carrera. En tres ocasiones, mir¨® a la derecha, para o6ervar a Christie. Era un mal s¨ªntoma. Hab¨ªa perdido. Christie lleg¨® como un tiro, con cuatro cent¨¦simas de ventaja sobre Drummond y un metro sobre Carl Lewis. Entusiasmado se abraz¨® a su novia y comenz¨® a recibir felicitaciones. Su gran rival se acerc¨® y le tendi¨® la mano. El brit¨¢nico la acept¨® con un adem¨¢n seco. Luego se fue entre la alegr¨ªa de los aficionados.

"Esta carrera s¨®lo es un paso hacia el enfrentamiento en el campeonato del mundo. Para m¨ª, no representa algo especialmente importante. Lewis ha ganado muchos t¨ªtulos despu¨¦s de haber perdido pruebas como ¨¦sta", manifest¨® Christie.

Lewis achac¨® su derrota a su mala puesta en acci¨®n. "Quer¨ªa ganar, pero tuve una mala salida. Estar¨¦ a punto dentro de dos semanas. Hubiera preferido un tiempo m¨¢s caluroso, pero no tengo ninguna excusa. Christie ha realizado una gran carrera".