Un documento marcado por el discurso de Gonz¨¢lez

El pensamiento del secretario general del PSOE, Felipe Gonz¨¢lez, corre la ponencia marco de la primera a la ¨²ltima p¨¢gina. La necesidad de renovaci¨®n del partido, lo imperioso de producir reformas en la red social de asistencia para preservarla de un declive, el combate del paro a toda costa promoviendo las reformas laborales que estima necesarias, as¨ª como los incentivos a los empresarios para animar la contrataci¨®n y la lucha contra el fraude, son elementos que salpican los cinco apartados del borrador de la ponencia marco. Todas estas ideas han sido expuestas por Felipe Gonz¨¢lez en las ¨²ltimas semanas; primero en Viena, despu¨¦s en Bonn, a continuaci¨®n en Par¨ªs, y por ¨²ltimo, el pasado fin de semana, en Granada.Dice la ponencia que los socialistas espa?oles buscan la renovaci¨®n, "que no significa partir de pero ni dar un salto en el vac¨ªo, sino un paso m¨¢s en el proceso de reformas, que entronca con la evoluci¨®n hist¨®rica del PSOE y que responde a las propias necesidades de evoluci¨®n de la democracia en las sociedades europeas".

Concesiones al guerrismo

Los ponentes, despu¨¦s de anunciar en las primeras 80 p¨¢ginas posibilidades de reforma, dejan para el final su afirmaci¨®n de que siguen siendo socialistas. "Frente a la ideolog¨ªa neoliberal, los socialistas creemos en el inter¨¦s p¨²blico, y no en los ego¨ªsmos particulares". "No creemos que el mercado pueda sustituir a la voluntad colectiva, expresada a trav¨¦s de la participaci¨®n democr¨¢tica y traducida en acci¨®n p¨²blica".Con estas afirmaciones se quiere encontrar un equilibrio entre lo que han sido en estas ¨²ltimas semanas dos discursos que aparec¨ªan contrapuestos. Uno, representado aparentemente por el vicesecretario general, Alfonso Guerra, y otro, por Felipe Gonz¨¢lez.

En la ponencia se pueden apreciar p¨¢rrafos que se han escuchado a Alfonso Guerra y otros que son textuales de Felipe Gonz¨¢lez, y los dos se han hilado apareciendo como un todo. "La renovaci¨®n del, partido se apoya en un principio plenamente actual: un partido socialista no es ¨²nicamente un instrumento para obtener votos y asumir democr¨¢ticamente el poder para ejercerlo y conservarlo". Este p¨¢rrafo, plenamente guerrista, contin¨²a dando cancha al otro sector: "Desde esa convicci¨®n impulsamos un proceso de renovaci¨®n que parte de la afirmaci¨®n de que la raz¨®n de ser de un partido socialista no es la gesti¨®n del orden establecido, sino su progresiva transformaci¨®n hacia una sociedad que tenga cada vez m¨¢s bienestar, justicia, libertad, solidaridad y cultura".

"Ello no excluye la capacidad de gesti¨®n del presente", a?ade.